Google acaba de ampliar las posibilidades de acuerdo entre los desarrolladores de aplicaciones y los usuarios descontentos. Hasta hace poco, cuando queríamos conseguir un reembolso de una compra realizada dentro de una aplicación o de algún servicio de suscripción, ya que Google solo permitía devolver todo el dinero o no hacer el reembolso, pero no había puntos intermedios. Ahora Google permite devoluciones de Google Play parciales, y por lo tanto los desarrolladores podrán establecer en su política de compra cuál es su posición al respecto.
Este cambio en la política de Google es bastante interesante porque, como es presumible pensar, cuando el creador de una aplicación solo tiene como posibilidad devolver todo el dinero de una compra realizada dentro de la misma, lo más probable es que el mismo deniegue la devolución y por lo tanto aquel usuario descontento no tenga más remedio que resignarse a perder su dinero. Ahora el porcentaje de posibilidades de llegar a un acuerdo son mucho mayores.
Devoluciones de Google Play parciales de compras integradas y suscripciones, no de apps
Es importante recalcar que Google solo ha habilitado los reembolsos parciales para compras realizadas dentro de una aplicación (por ejemplo, los típicos micro pagos en juegos), pero no para las aplicaciones en sí, que seguirán el sistema habitual hasta la fecha.
Por lo tanto, seguimos teniendo un plazo de dos horas para conseguir la devolución del dinero de una aplicación de pago comprada por error, algo de lo que se encarga Google automáticamente y que conlleva una devolución integral de nuestro dinero, con la posibilidad de obtener la devolución en un plazo de 48 horas si lo hacemos desde la versión web de Google Play, aunque aquí ya no queda garantizada la devolución al 100%.
Junto a las compras integradas en la aplicación Google también habilita devoluciones parciales en Google Playa las suscripciones de pago, un apartado donde la posibilidad de que un usuario esté descontento puede ser mayor si tenemos en cuenta que la prestación por la que se paga se desarrolla en un plazo extendido de tiempo, pudiéndose dar la posibilidad de que el usuario no esté satisfecho con el servicio al que voluntariamente se suscribió, pero que no ha colmado sus expectativas.
Por lo tanto, las devoluciones de Google Play parciales nos permiten conocer con anterioridad a la compra que porcentaje o cantidad de dinero podremos recuperar, abriéndose un abanico más amplio de posibilidades entre desarrollador y comprador para llegar a un acuerdo.
Esto por un lado da al desarrollador la posibilidad de perder solo una parte del dinero, pero también permite al comprador asegurarse al menos la recuperación de parte del dinero gastado. Eso sí, todo dependerá de la buen fe del desarrollador de la aplicación, ya que Google en ningún momento obliga a los desarrolladores a recoger este tipo de devoluciones en sus condiciones de compra.
Ya por último, debemos tener en cuenta que las devoluciones de Google Play de tipo parcial solo serán posibles para compras y suscripciones realizadas a partir de marzo del 2018 y que no todos los métodos de pago están permitidos. Tampoco serán posibles cuando se trata de servicios suscritos directamente con Google.