A falta de dos semanas para que Apple anuncie oficialmente los resultados económicos correspondientes al último trimestre, los analistas aprovechan la tesitura para lanzar sus previsiones de venta de iPhone, el producto de mayor peso en el catálogo del fabricante. Lo cierto es que las primeras aproximaciones son un tanto alarmantes para los intereses de la firma de la manzana puesto que RBC Capital Markets estima que de marzo a junio se venderán 39.5 millones de iPhones, muy por debajo de las cifras registradas el año pasado durante el mismo periodo. El descenso se acerca peligrosamente al 20%, motivo de alarma para la multinacional californiana.
Del mismo modo que a principios de año vaticinaban un cambio de tendencia en las ventas, los primeros analistas esta vez apuntan a un claro descenso de las ventas del iPhone 6s. El modelo ha sufrido la sombra del iPhone 6 desde su lanzamiento y su fin de ciclo como modelo portaestandarte parece que será la puntilla para la firma. A pesar de incluir novedades como la tecnología 3D Touch y otras mejoras a nivel de hardware, el diseño se mantenía inalterado. El resultado es que la pila de cambios introducidos no satisfacía desde un principio a los que ya disponían un iPhone, especialmente aquellos en poder del iPhone 6. Este factor unido al coste elevado de este tipo de dispositivos ha fomentado que el usuario retrase cada vez más la compra de una nueva generación de iPhone.
Un secreto a voces
Los resultados económicos del primer trimestre del año fueron un aviso. Desde entonces, distintos indicadores nos han dado pistas acerca de la trayectoria de Apple en el mercado de smartphones. Desde detalles tan poco específicos como el volumen de producción de los componentes del smartphone hasta las ventas en curso de la marca en uno de sus mercados más importantes, China. Tampoco nos olvidamos de otros estudios que indican que el periodo de renovación de iPhone se ampliará en los próximos años pasando de los dos habituales hasta los tres años. Un cúmulo de circunstancias, sin olvidar la presión de otros fabricantes a nivel global, que generan cierto estrés comercial a una firma que hasta hace meses se coronaba como la más valiosa en términos bursátiles.
Las ventas del iPhone 6s, hasta un 20% por debajo
Ahora, analistas como Amit Daryanani de RBC Capital Markets dejan ver sus estudios y las primeras impresiones. Según los cálculos iniciales, Apple venderá en torno a 39.5 millones de iPhones, lo cual nos lleva directamente a comparar esas cifras con las registradas durante el mismo periodo del año pasado. Un modo automático de contrastar la trayectoria comercial de la firma en un año. Pues bien, si recurrimos al histórico apreciamos que el año pasado Apple reconocía unas ventas de 47.5 millones de iPhones. Si el primer pronóstico de ventas de RBC Capital Markets se acerca a las ventas definitivas de Apple en este Q2 de 2016, estaríamos hablando de un descenso de ocho millones de unidades, en torno al 20%. En términos económicos será un buen golpe para las arcas de la tecnológica pues dejaría de ingresar en torno a 7.500 millones de dólares.
Sin duda, además del valor económico, si se materializan unos resultados como los propuestos por el citado analista, lo más trascendental para los intereses de los de Apple será el golpe mediático. Tal noticia supondrá la confirmación del declive de la norteamericana, ya sea transitorio, circunstancial o un indicio de un punto de inflexión en el mercado de smartphones. Y es que un resultado como el propuesto tendrá grandes consecuencias, y las primeras se dejarán notar en el mercado de valores, ese en el que los de Cupertino han experimentado un descenso gradual en el valor de sus títulos.