Durante las últimas 24 horas bq ha sido noticia por los despidos y recortes en su plantilla de trabajadores, además de la externalización de algunos de sus servicios estrella. Tras la publicación de la información disponible por parte de trabajadores y empresa podemos extraer una serie de conclusiones, aunque la más evidente parece corresponderse con la reducción de las ventas durante los primeros meses del año.
Aún no se puede cuantificar, pero el propio cofundador de la compañía, Rodrigo del Prado, indica que una de las causas de la reducción de la plantilla se centra en la adaptación al volumen de ventas de la compañía. No obstante, al menos según declaraciones del director general adjunto de bq, existen otros factores que han condicionado la situación. Y es que el fabricante de smartphones español pretende no desprenderse de su servicio de reparaciones, sino extender y acercar los centros de reparaciones a otras regiones a través de terceras empresas certificadas para tal objetivo. Este conjunto de factores ha derivado en la movilización de parte de la plantilla de la compañía, que ayer se hacía oír al denunciar la situación.
Las ventas no responden a las previsiones
Una de las alegaciones de Del Prado para justificar los despidos ha sido que la compañía debe adaptarse a las exigencias del mercado. Si bien se dice que las ventas de 2015 fueron superiores a las logradas en 2014, la trayectoria de la firma tecnológica con sello español durante los últimos meses del año no fueron lo esperado. Es más, la tendencia se habría mantenido durante los primeros meses de 2016, por lo que bq se habría visto obligada a reducir parte de su plantilla. Según la información ofrecida por los medios, los recortes han implicado el despido de unos 80 trabajadores, lo cual supondría cerca del 10% de la plantilla. A este respecto la cabeza visible de la firma alega que la reducción del personal es algo habitual puesto que se debe adaptar las necesidades de la empresa a los periodos durante los cuales se venden más o menos smartphones.
SAT para terceros
Sin embargo, la inquietud de los trabajadores de bq va más ala de los despidos efectuados hasta la fecha, puesto que temen un futuro ERE. Y es que bq ha afrontado cambios drásticos en varios de sus servicios post venta. Servicios que hasta ahora habían concedido al fabricante un alto índice de satisfacción del cliente, ahora cambiarán como tales. Nos referimos al servicio de reparaciones y atención al cliente. En el primer caso, bq pretende externalizar este servicio, lo cual implicará reducir la carga de trabajo de esta división en favor de terceras empresas. Según la compañía, se trata de una estrategia para mejorar el servicio. Al externalizarlo podrán acercar la reparación de móviles a otras regiones, de modo que se podrá reducir el tiempo que un usuario se quede sin su móvil hasta ser reparado.
En cuanto al servicio de atención al cliente, los trabajadores denuncian que la compañía ha iniciado cambios que empeorará una parte en la que la empresa destacaba por encima del resto. Y es que el servicio telefónico de soporte técnico pasa de ser gratuito a un 902. A este respecto Del Prado indica que las consultas seguirán siendo gratuitas, pero que el servicio de pago se centra en las consultas que requieren un nivel de especialización mayor.
Una espiral peligrosa
Ante esta perspectiva, la situación parece evidente. Los resultados de bq no parecen ser los esperados. Las ventas de smartphones se complican en un mercado donde cada vez es más complicado destacar y eso repercute en la reducción de costes, que por ahora parece que empiezan a afectar a una parte de la plantilla. ¿Hasta qué punto están complicadas las cosas para bq? ¿Veremos más despidos en forma de ERE tal y como teme la plantilla? Sin duda, de producirse este cambio serán malas noticias para un fabricante que tanto se las prometía.