La duración de la batería de un smartphone es uno de los grandes retos no solo de los fabricantes, sino de la propia desarrolladora del software. De la óptica conjunción entre hardware y software se pueden conseguir resultados idóneos. En el caso de Google y su plataforma Android, ésta ha sido una lucha constante dificultada por diferentes factores. Algunos de estos son la diversidad de configuraciones de hardware e incluso la personalización imprimida por las firmas en sus smartphones en forma de interfaces gráficas propias. Sin embargo, con la llegada de Android 6.0 Marshmallow el gigante de Internet quiere imponer una serie de condiciones para controlar los procesos que pueden perjudicar la autonomía.
La publicación de una guía sobre Android Marshmallow a modo de definición de compatibilidad nos abre las puertas a numerosos detalles e información en torno a las novedades que nos deparará Android 6.0. Si bien ya es posible ver en funcionamiento multitud de dispositivos Nexus con dicha versión, no seremos capaces de conocer los cambios aplicados en la nueva versión hasta que la misma sea establecida en otros dispositivos de otras marcas, especialmente en aquellas que hacen de la interfaz gráfica un símbolo de diferenciación.
Condiciones adicionales para conseguir la certificación de Google
Y es que la definición de compatibilidad de Android 6.0 saca a relucir algunos requerimientos que los fabricantes de smartphones Android deberán tener en cuenta si quieren que la gran G certifique sus equipos. Esto es confirmar que el smartphone sobre el que se ejecuta el sistema operativo cumple los requisitos impuestos por la compañía precursora y desarrolladora del proyecto. A este respecto es interesante resaltar cómo Google va a empezar a imponer ciertos principios que pueden afectar en gran medida a la autonomía de los smartphones.
Concretamente nos referimos a Doze, el nuevo modo en Android 6.0 que promete alargar la vida de la batería a costa de controlar los procesos de apps en segundo plano. Un algoritmo patentado por Google que promueve la optimización del consumo energético y que será premisa fundamental e Android 6.0. Por tanto, los fabricantes tendrán que respectar esta nueva característica si quieren ser validados.
Las interfaces gráficas personalizadas tendrán que adaptarse a Doze
¿Y en qué afecta Doze a los fabricantes de smartphones? Principalmente todo girará en torno a las interfaces gráficas personalizadas, las herramientas y funciones adicionales que las complementa. Con Android 6.0 los fabricantes tendrán que respetar el protocolo en el que se basa el funcionamiento del sistema de congelación de apps en Marshmallow. De lo contrario, si fuese necesario para el funcionamiento de la personalización, el fabricante deberá incluir la opción de controlar dichos procesos en segundo plano desde los ajustes y configuración de apps gestionadas por Android mediante Doze. De este modo el usuario tendrá la capacidad de controlar qué procesos se ejecutan voluntariamente en segundo plano independientemente a los del propio sistema operativo.
Sin duda, una posición la de Google que ayudará a homogeneizar la plataforma de Android y ofrecer una experiencia de uso –en este caso la duración de la batería- que no se vea afectada por el software de terceros. No obstante, las primeras pruebas de autonomía realizadas a los nuevos Nexus 5X y Nexus 6P con Android 6.0 nativo no han sido las más esperadas…