Uno de los problemas que suelen tener los Android en particular, tienen que ver con la fragmentación de los chips de memoria NAND con el tiempo. Esto hace que poco a poco se reduzca su rendimiento con el tiempo y de ser terminales que podrían ser aprovechables a día de hoy, tras un tiempo de uso, cada vez funcionen más y más lento. La buena noticia es que hay solución y a continuación os damos todos los detalles.
No es un problema del software, es la forma que tienen de trabajar las memorias NAND que guardan la información de forma diferente a otros tipos de memoria, como pueden ser los discos duros. En ellas, cuando borramos un archivo, en realidad no se borra sino que se marca el sector como «sin uso» y disponible para reescribirlo con nuevos datos. Tanto los datos como el sistema de archivos se quedan ahí hasta que venga algo nuevo para reescribirlo por lo que a medida que grabamos y borramos datos, el mapa del sistema crece y éste tiene que recorrer más espacio para encontrar la información que guarda, incluyendo todas las entradas redundantes que se suponen borradas.
Esto, con el tiempo, ralentiza el funcionamiento del terminal a no ser que cuente con soporte para la tecnología TRIM en su software, como ocurre desde Android 4.3. Hasta entonces, si tenemos un terminal ya con unos años y con una versión del sistema operativo de Mountain View que se encuentre por detrás de esta versión, es probable que tengamos un terminal sin soporte para tecnología TRIM.
Ahora bien, la buena noticia es que aunque Google parezca que se ha olvidado de estos usuarios, los desarrolladores no lo han hecho y han creado una herramienta, Trimmer, para poner a punto cualquier terminal, por muchos años que tenga encima. A continuación podéis descargarla dando al botón Download.
Por ejemplo, si tenemos un Nexus 7 de 2012, es probable que ya no ande tan fino como antes. La única «pega» es que tenemos que buscar la forma de rootear nuestro terminal para lograr que la aplicación pueda hacer su magia y que el dispositivo sea capaz de volver a recuperar la fluidez que tenía como cuando lo sacamos de su caja – o bueno, casi -.
Es tan simple como descargarla, sin coste alguno pero os animamos a realizar una donación a los desarrolladores que, probablemente, le van a devolver una nueva vida a vuestro vetusto Android.