Cuando hablamos de smartphones chinos, hay quien lo hace con algún tipo de reparo, e incidiendo siempre que se habla de su éxito en que todo su secreto está en lo que cuestan. Parece que no dan calidad y explicamos sus ventas recurriendo al argumento de que, simplemente, son más baratos que sus homólogos occidentales, esos que suelen engordar los precios por que gastan más dinero en otras partidas como la publicidad.
Pero como siempre ocurre, las cosas no son tan sencillas como parecen y hay mucho más detrás del éxito de un modelo de distribución que es radicalmente distinto al que estamos acostumbrados y que, a la luz de los resultados, es como para que alguna compañía empiece a plantearse el probarlo alguna vez. A ver si mejoran sus cifras.
El Meizu M1 se agota en apenas un minuto
Ha sido la marca China la que hoy mismo ha puesto a la venta una remesa de 100.000 unidades de su Meizu M1 que ha agotado en apenas 60 segundos, en una de las ya tradicionales ‘ventas flash’ a las que nos tienen acostumbrados en ese país. Una forma de vender smartphones que permite a la compañía ajustar mucho los costes a la demanda real, y evitar encontrarse con dispositivos cogiendo polvo en un almacén.
Y ojo que en esta ocasión esos 100.000 Meizu M1 no eran pre-reservas ni nada parecidom ya que para optar a uno de ellos teníamos que cargar con los datos de nuestra tarjeta el importe de la compra. Que en el caso de este móvil no es algo escandaloso por que recordemos que su precio es de 699 yuanes, algo menos de 100€ al cambio.
Las ‘ventas flash’, un fenómeno puramente chino
En occidente las marcas asentadas en cada uno de los territorios desde los que operan, no solo tienen que atender a los costes de esa presencia sino que las distribuciones se llevan a cabo sobre estimaciones de ventas. Esto tiene un riesgo empresarial muy evidente que es el equivocarse en estas apreciaciones. Y no hay mercancía más cara que la que descansa en un almacén sin venderse.
Las marcas chinas no cuentan con este handicap por que a su no presencia internacional, que no le supone un gasto añadido, hay que sumarle esta forma de vender en la que apenas arriesgan un stock importante. Al revés, ajustan la fabricación de un terminal a la demanda y son estas ‘ventas flash’ con unidades limitadas las que les permiten ir administrando la cantidad de dispositivos que pueden fabricar.
¿Pero este método de ‘ventas flash’ consigue mantener la demanda a lo largo del tiempo? Dependiendo del fabricante y del dispositivo es posible que ésta vaya decreciendo y obligando a sus potenciales clientes a buscar otras alternativas ante la escasez de oferta. Esto no es positivo, pero es algo que seguramente no importará a los fabricantes que ante todo lo que quieren es recuperar esos márgenes tan ajustados con los que operan en las ventas de cada dispositivo.
Y a vosotros, ¿qué os parecen estas ‘ventas flash’? Contadnos.
Fuente: GSMArena