Los expertos en la gestión recursos empresariales y de la competencia dicen que es bueno para el mercado que haya diferentes alternativas y que los usuarios puedan elegir. Ahora bien, dónde se marca el límite entre la sana competencia y el mercado completamente fragmentado. Una vez que llegue Tizen de la mano de Samsung podremos ver si se trataba de algo bueno, o una derrota anunciada frente a Android.
Esta misma semana hemos contado que Tizen llegará en primavera tras un anuncio que ha efectuado Samsung en el que aseguraba que ya está disponible para ser lanzada al mercado. Aunque no hay exactitud ninguna sobre el terminal que será “conejillo de Indias”, lo que sí parece claro es que la decisión está tomada. Además, también ha entrado en juego la compañía de telecomunicaciones Domoco, que ha asegurado que en el mes de marzo los terminales Samsung que comercialice llevarán Tizen como OS.
Ahora bien, tras esta llegada, que ya resulta inminente, hay un amplio frente de preguntas que se plantean y que nadie sabe muy bien cómo resolver. Vamos a intentar poco a poco resolver algunas de ellas. La primera es la posición de Samsung, ¿realmente la compañía coreana pretende sustituir un OS tan asimilado por los usuarios como Android por una verdadera incógnita como es Tizen? La respuesta de los coreanos es que se trata de una alternativa muy simple a Android. Parece muy buena respuesta, pero encierra varias incógnitas. ¿Realmente pretenden cambiar Android por Tizen, o se trata de un complemento?, ¿cómo puede saber Samsung que los usuarios no compran sus terminales por el OS?
Tizen como alternativa
En la última pregunta está la clave. Cuando desde este medio se ha sugerido a los lectores si mucho usuarios ya están comprando sus terminales por el tipo de OS que lleva, muchos aseguran que eso no tiene nada que ver, ¿pero hasta qué punto es real? Es decir, ¿por qué Nokia con Windows Phone y muchos de los buenos smartphones que tienen no parecen tener la misma acogida que Samsung u otros terminales similares con Android?
Así pues, la respuesta sobre la elección del OS no es tan baladí. Por eso, el titular que encabeza este texto, en el que se habla de una lucha desigual entre Tizen y Android, tiene visos de ser realidad, porque si ya hay mucha equidistancia en cuota de mercado entre Android y todos los demás, qué va a suceder con Tizen al que de momento no muchas operadores les está llamando la atención.
¿Perder la dependencia de Android? Sí, parece ser el argumento por parte de Samsung a la hora de desarrollar Tizen, pero si atendemos al ejemplos de los tradicionales ordenadores de mesa, en materia de sistema operativos, al margen de Apple, Windows, en esta caso, siempre ha sido el líder indiscutible. ¿Esto quiere decir que en el mercado móvil también solo habrá hueco para uno? Posiblemente no, pero al final los usuarios buscan tendencia, y no parece que Tizen vaya a marcar ningún camino, por lo que todo hace pensar que Android seguirá dominando el mercado.
Fuente: Ubergizmo