Vodafone comercializa desde el pasado mes de junio la primera oferta de conexiones LTE en España. La irrupción de esta tecnología inalámbrica ofrece una serie de ventajas al usuario tales como una mayor tasa de velocidad de subida y bajada, además de un tiempo de respuesta inferior a la proporcionada por el 3G. Si eres cliente de Vodafone o piensas serlo pronto te proporcionamos las claves para poder disfrutar de las ventajas del 4G.
Los anuncios publicitarios de Vodafone han permitido dar a conocer la nueva generación de conexiones de datos entre la población. El principal reclamo de la campaña ha sido la elevada velocidad de acceso a la red de Redes, una media de diez veces superior al 3G y mucho más rápida que incluso gran parte de las conexiones de ADSL disponibles en España. De hecho, el máximo teórico que es capaz de ofrecer mediante el estándar LTE o Long Term Evolution es de 150 Mbps en descarga y 50 Mbps en subida. Disfrutar de este servicio es posible desde el pasado 1 de junio con el dispositivo adecuado.
Cobertura geográfica
Actualmente las conexiones LTE de Vodafone están disponibles para un 55% de los ciudadanos de Barcelona, Bilbao, Madrid, Málaga, Palma de Mallorca, Sevilla y Valencia. En los próximos meses la operadora espera extender aún más su servicio en el territorio nacional tras la liberación del espectro de los 800 MHz en 2014, que será clave puesto que mejorará notablemente la cobertura 4G tanto en exteriores como en interiores. Para hacer un seguimiento de la cobertura del servicio y el avance del proyecto, la propia operadora dispone de una herramienta para comprobar qué zonas están catalogadas como óptimas para disfrutar en plenas condiciones de una conexión 4G.
Tarjeta USIM y Smartphone 4G, las herramientas básicas
Una vez hayamos comprobado el grado de cobertura disponible en nuestra zona, para conectar con las redes 4G de Vodafone necesitamos hardware compatible con la tecnología inalámbrica. En este aspecto existen dos factores implicados:
La primera consideración es la de disponer de una tarjeta SIM catalogada como USIM, que es la única capaz de funcionar bajo dicha tecnología. Si el formato de tu tarjeta es microSIM, nanoSIM o dispone de una capacidad de 88K no será necesario sustituirla porque éstas son del tipo propiamente dicho. De lo contrario, tan solo debes acudir a una de las tiendas físicas oficiales de la firma para que sea reemplazada gratuitamente por una SIM compatible.
En lo que compete al dispositivo, ya sea smartphone o tablet, la operadora dispone de un catálogo con un total de 10 modelos compatibles (pronto llegarán varios más) que se corresponden con terminales de última generación. Si deseamos comprobar si nuestro modelo está entre la lista de equipos preparados para el 4G, es posible acceder a la sección de ajustes inalámbricos del equipo y comprobar si aparece la opción del 4G. En el caso de terminales Android, esta opción está accesible desde Ajustes, Más Redes, Redes Móviles, Modo de Red. Para equipos Windows Phone la secuencia a seguir es Configuración, Red Móvil, Velocidad de conexión máxima (debe ser superior a 42 Mbps). En el caso de disponer de un iPhone, por su configuración técnica actualmente solo es compatible el iPhone 5. Para la comprobación de las tabletas iPad se puede acceder a Ajustes, General, Datos Móviles, Activar 4G.
Si ya somos clientes de Vodafone, tan solo es necesario activar el servicio. Esta operación es posible llevarla a cabo desde el servicio de atención telefónica al número 123 (122 si es para empresas) o en cualquier tienda Vodafone. Con esto será suficiente para disfrutar de las conexiones de datos más velocidad actualmente disponibles en España.