LG presentaba el LG Optimus G Pro como el primer smartphone en equipar un procesador Qualcomm Snapdragon 600, cuyo rendimiento y eficiencia energética serán dos de sus bazas. Por ahora, la mejor forma de demostrar su potencial es comparando los resultados conseguidos en diferentes test de rendimiento frente a los de otros modelos como Nexus 4, iPhone 5 o Sony Xperia Z. Éstas son las primeras conclusiones.
Si bien los test de rendimiento no son el método más certero para medir el rendimiento de un smartphone (depende de la optimización del software al hardware del equipo), bajo igualdad de condiciones sí son las herramientas con la que podemos “hacer tangible” el rendimiento de este tipo de dispositivos. Más interesante puede presentarse la comparación de resultados de diferentes modelos, ya que de una forma gráfica se puede apreciar en mayor grado las prestaciones de uno y otro.
Esta labor es la que han llevado a cabo los chicos de Ubergizmo, que han sometido al LG Optimus G Pro a un serie de pruebas comparativas con las que demostrar cuál es la diferencia entre sus más inmediatos perseguidores. Además, se han tomado la molestia de enfatizar los últimos retoques que ha aplicado LG en el software del equipo, ahora más estable que con versiones anteriores.
AnTuTu Benchmark
Este test de rendimiento refleja el funcionamiento no solo del procesador, sino que también lo hace en conjunto con el rendimiento de la memoria y GPU. Por tanto, no es el apartado más indicado para posicionar el rendimiento del chip Qualcomm Snapdragon 600 frente a otras alternativas. Más bien sirve para comprobar el funcionamiento general del equipo y su firmware. En este apartado los resultados indican que el conjunto de procesador, gráfica y memoria, entre otros apartados, ofrecen una experiencia muy pareja a la ofrecida por el Sony Xperia Z, con procesador Qualcomm Snapdragon S4 Pro. Sin embargo, la puntuación cercana a los 20.000 puntos se distancia frente a los cerca de 16.000 de un Galaxy Note 2, el siguiente modelo en la lista.
GLBenchmark 2.5
Ésta si es una prueba donde se puede extraer la primera conclusión puesto que GLBenchmark 2.5 se centra en medir el rendimiento de la GPU. Puesto que el LG Optimus G Pro incorpora la misma GPU Adreno 320 y frecuencia de funcionamiento que otros adversarios como el Xperia Z, las estadísticas resultantes son muy similares, con puntuaciones que rozan los 30 frames por segundo.
Geekbench 2
Otro de los apartados interesantes que se desprenden de la prueba, puesto que este test mide el rendimiento puro (cálculo en coma flotante) de procesador. En este punto la CPU el LG Optimus G Pro demuestra su diferencia frente al Snapdragon S4 Pro, aunque solo sea por la mayor frecuencia de trabajo, con 200 MHz más. La puntuación es de unos 2.800 puntos, distanciándose de los apenas 2.100 puntos de modelos como Galaxy Note 2 (Exynos 4412), Nexus 4 y Xperia Z (Snapdragon S4 Pro).
Otro de los test que más enfatiza la fuera bruta del LG Optimus G Pro es Quadrant, donde consigue puntuaciones superiores a 12.000. En este caso, la diferencia de rendimiento frente a modelos como el Galaxy Note 2 es cercana al 70%.
Fluidez de la interfaz gráfica, una constante
A falta de una prueba de “fondo” que nos facilite la autonomía del LG Optimus G Pro y la eficiencia de su procesador, otro de los baremos utilizados para medir la potencia de un equipo es la propia experiencia de usuario del que lo prueba. De los comentarios de Ubergizmo podemos extraer que el LG Optimus G Pro muestra en todo momento una notable fluidez del sistema, al mismo nivel que el Nexus 4. La diferencia está en la interfaz gráfica puesto que mientras el modelo de Google dispone de Android “puro”, el smartphone de LG juega en desventaja con una capa más recargada, lo cual marcaría la diferencia.