¿Sabías que gran parte de la familia de dispositivos Samsung Galaxy S, Galaxy Note y Galaxy Tab pueden ofrecer un mayor rendimiento con la instalación de una aplicación? Este es el objetivo de Tegrak Overclock, un software que permite gestionar la frecuencia y voltaje tanto de la CPU como de la GPU para optimizar su potencia acorde al gasto energético del chip.
Aunque los fabricantes establecen una frecuencia de funcionamiento determinada en sus procesadores atendiendo a variables como el rendimiento, la disipación del calor y el consumo energético, lo cierto es que son susceptibles a variaciones sin riesgo si respetamos los límites de seguridad. Existen multitud de aplicaciones Android capaces de extraer potencia extra de los chips CPU y GPU, del mismo modo que sucede con los ordenadores de sobremesa. También existe la posibilidad de reducir el consumo eléctrico. Se trata de una técnica denominada Overclock y underclock y consiste en la modificación de características del procesador tales como la frecuencia de reloj, el voltaje e incluso las escalas de frecuencia en estado de máximo funcionamiento y reposo.
Tegrak Overclock simplifica el Overclock
En la Scene de Android encontramos métodos específicos para tal fin, aunque normalmente se requieren conocimientos extra para un correcto funcionamiento (en la mayoría de ocasiones es necesario instalar un kernel compatible con la herramienta en cuestión). Sin embargo, un desarrollador coreano ha diseñado una aplicación específica para buena parte de los modelos Samsung Galaxy que permiten realizar la misma función de Overclock y underclock sin necesidad de modificar o cambiar el kernel del sistema. Aún así, es requisito indispensable que el terminal esté rooteado.
La herramienta en cuestión es Tegrak Overclock y está disponible en Google Play. Una vez instalada en los Samsung Galaxy compatibles, el usuario tiene la potestad de modificar la frecuencia de reloj, el voltaje y la escalabilidad del procesador dentro de unos límites. Dependiendo de si buscamos una ganancia de rendimiento o un mejor consumo energético, podremos subir o bajar la frecuencia mínima y máxima de la CPU. A su vez, para optimizar la autonomía también se puede variar el voltaje del núcleo, reduciéndolo en los casos que deseemos reducir la frecuencia del procesador en la búsqueda por el ahorro energético o subiéndolo si lo que buscamos es subir de vueltas el procesador para un mayor rendimiento. Del mismo modo que con la CPU, Tegrak permite la configuración de frecuencias y voltaje de la GPU. Aunque este proceso es un tanto delicado puesto que un valor incompatible puede causar daños en el hardware, Tegrak Overclock está específicamente adaptado a los procesadores de los Samsung Galaxy, de modo que detecta los máximos valores aceptados por los chips de los smartphones.
A pesar de todo, conviene seguir los consejos del propio desarrollador, bien a través de las instrucciones recogidas en Google Play o desde su propia página web. Las más a tener en cuenta son que la aplicación solo es válida para los modelos de las familias Samsung Galaxy S, Galaxy S3, Galaxy S3, Galaxy Note y Galaxy Tab con kernel original (stock) que figuran en el listado proporcionado por el propio creador de la aplicación. Quedan excluidos los modelos con ROM personalizadas como CyanogenMod, MIUI y AOSP.