Tras leer esta noticia probablemente te sientas identificado con alguno de los casos que vamos a exponer sobre el pago o la gratuidad del servicio de mensajería instantánea más extendido en España, WhatsApp. En realidad, se ha generado una situación caótica alrededor de esta aplicación ya que algunos usuarios han pagado y otros no, y sin embargo, hasta ahora, la aplicación se ha renovado de manera automática.
Gracias a la colaboración de nuestros compañeros de Android Ayuda podemos establecer cómo funciona el sistema de pago de WhatsApp. Antes de empezar a describir las situaciones de gratuidad o pago en las que se encuentran muchos usuarios, nos gustaría dejar claro que hay una tendencia a pagar por el servicio, y que en un futuro no muy lejano todo el mundo pasará por caja.
Por naturaleza WhatsApp siempre ha sido de pago. De hecho, comenzó a utilizarse con iPhone y su precio actual es de 0,89 euros. Su facilidad de manejo y la rápida implantación en los clientes de dispositivos de Apple, provocó que también se desarrollara para otros sistemas operativos, fundamentalmente, Android. Si nos vamos a la Google Play veremos que lo que promociona WhatsApp son 12 meses de uso gratuito para pagar posteriormente 0,99 euros al año. Y esto nunca ha cambiado, ha sido así desde el principio, lo que pasa es que en la práctica no se ha cumplido. Muchos usuarios llevan más de un año usando WhatsApp y nunca han pagado por ello.
¿Qué es lo que pasa?
Pues esta práctica de “todo gratis” nos recuerda un poco a lo que pasó en los inicios de los SMS. Los operadores permitían el disfrute gratuito de los envíos de los mensajes para conseguir que los usuarios conocieran el sistema y se “engancharan” a él. Después, empezaron a cobrarlo y a ganar dinero con él. El caso de WhatsApp con los Android es parecido ya que hemos tenido “barra libre” y ahora parece que los plazos se acortan buscando siempre el pago de una cuota.
Como usuarios Android nos podemos encontrar con varias situaciones: haber pagado, estar en periodo de prueba gratuita o en estado de caducidad. En el primer caso puede haberte ocurrido lo mismo que a nuestro compañero de Android Ayuda: se quedó sin batería en su Xperia, y para seguir usando WhatsApp, introdujo la tarjeta en un smartphone de Apple. Al intentar instalar la aplicación, tuvo que pagar, y por tanto, se registró como cuenta de pago. También es posible que hayas pagado voluntariamente desde el propio terminal Android o incluso, que seas de los pocos usuarios a los que se les ha cobrado.
En segundo lugar, cuando decimos que estamos en periodo de prueba, es que estamos dentro del año de gratuidad del que habla Google Play. El problema es que, terminado el plazo, a la mayoría de los usuarios no les han cobrado porque el servicio se renueva automáticamente. Y aquí viene el lío, porque no a todo el mundo se le ha renovado por el mismo plazo de tiempo: 10 años, un año, dos años y más recientemente, seis meses.
En tercer lugar, cuando hablamos de estado de caducidad es que nuestra cuenta no va a permitirnos ni recibir ni enviar mensajes, el periodo gratuito ha terminado.
Dicho todo esto, es obvio que los que han pagado por el uso del sistema tienen su servicio activo como cualquier otro. Los que no han pagado porque aún están en periodo de prueba, tienen muchas posibilidades de que les cobren el servicio cuando termine este plazo porque parece que WhatsApp va a dejar de renovar automáticamente la gratuidad –ya hemos mencionado que están acortando los plazos–. Por tanto, el desarrollador no tiene previsto que sea gratis de por vida y cada vez conocemos más casos de usuarios que han tenido que pagar por su uso. Para saber cuándo caduca la cuenta y estar atento a la posible fecha de cobro, o la renovación del servicio si tienes suerte, entra en el Menú, Configuración, Info de Cuenta e Información de pago.