En la presentación del nuevo Sony Xperia P tuvimos ocasión de ver entre sus especificaciones y características la tecnología WhiteMagic. Los japoneses nos informaron de que con esta técnica la pantalla sería completamente visible bajo ambientes de fuerte luminosidad, como la luz directa del sol. Sin embargo, ¿cómo funciona? Te lo contamos con todo lujo de detalles.
Uno de los avances más destacados en los smartphone durante los últimos años ha sido consecuencia directa de la implantación de pantallas táctiles, cada vez de mayores dimensiones. La experiencia de usuario ha ganado muchos enteros al producir una sensación más placentera a la hora de navegar por Internet o visualizar vídeos y fotos, entre otras actividades. Sin embargo, la autonomía de los smartphones y la visibilidad en exteriores ha sido desde siempre el talón de Aquiles de los LCD.
Turno de Sony
Los fabricantes buscan soluciones. LG tiene en sus filas la tecnología NOVA. Samsung ha optado por sus display OLED tales como los Super AMOLED. Cada tecnología aporta una serie de mejoras, pero no siempre pulen su funcionamiento y rendimiento a todos los niveles. Sony, fruto de su experiencia en otros mercados, nos ha querido llevar su tecnología WhiteMagic a los paneles táctiles de sus smartphones. Si ya el año pasado introducía Mobile BRAVIA Engine para optimizar la nitidez de las imágenes en modelos como el Sony Ericsson Xperia Arc, ahora es el momento de dar un paso al frente con el Sony Xperia P.
El “secreto” de WhiteMagic
¿Qué tiene de especial la pantalla de este nuevo smartphone? Principalmente, intentará solucionar algunos de los problemas más destacados que merman las prestaciones de los teléfonos de última generación como son el alto consumo energético y la baja visibilidad en ambientes muy luminosos (tomamos como referencia la luz directa del sol). Para minimizar estos inconvenientes, la japonesa ha modificado ligeramente el funcionamiento de la pantalla LCD con retroiluminación. Si bien los display OLED no necesitan de una fuente de luz detrás de la capa de cristal líquido, los paneles LCD así lo requieren para iluminar en mayor o menor grado los tres subpíxeles (rojo, verde y azul) que forman un píxel de la pantalla y ofrecer una determinada tonalidad. Es aquí donde Sony ha querido aportar su tecnología para refinar su funcionamiento al añadir un cuarto subpíxel que no cuenta con “pigmentos” e irradia luz blanca. Sin embargo, la mejora no llega solo de la parte del hardware. A este cuarto subpixel se le suma un complejo software que permite polarizar la luz de los cuatro emisores (subpíxeles) de la forma correcta sin que se produzca distorsión del color.
Mayor luminosidad
¿Y cuál es la ventaja de todo este conjunto de algoritmos y hardware? Lo primero de todo es que se consigue unos niveles de brillo muy superiores a cualquier LCD convencional. Tal y como podemos apreciar en una de las imágenes, la máxima luminosidad proporcionada con la retroiluminación al 100% de sus posibilidades es de 935cd / m2 (935 candelas por metro cuadrado) frente a los poco más de 450 que proporciona un display tradicional. Como podéis deducir, al mayor brillo desprendido por la pantalla del Sony Xperia P con la ayuda de la tecnología WhiteMagic mejora su visualización en ambientes de luz intensa.
Menor consumo
En cuanto al consumo energético, Sony nos explica a la perfección el porqué WhiteMagic facilitará un aumento de la autonomía del smartphone de una forma muy gráfica (segunda foto adjunta). La japonesa juega con el nivel de brillo proporcionado por la retroiluminación. El cuarto subpixel “blanco” permite que incluso a un 50% de intensidad, la pantalla desprenda hasta 530 cd por metro cuadrado, nivel superior al de un LCD convencional al 100%. Es aquí donde se consigue un menor consumo energético, que según los datos proporcionados por la marca son de hasta el 50%
Diferentes modos: turno del sensor de luminosidad
No obstante, en este punto juega un papel muy importante el sensor de luz incluido en el frontal del teléfono. Al ser fotosensible, manda la información técnica necesaria para que el software, perfectamente calibrado, decida en todo momento qué modo es más conveniente usar. Así pues cuando utilizamos el teléfono en la calle, el sensor mide el nivel de luz ambiente y se activa la máxima intensidad. En interiores, la intensidad de brillo se reduce pues no es necesario un aporte extra de brillo para superar la luminosidad de los rayos solares. El resultado, menor energía para mostrar gráficos en pantalla. No obstante, Sony permitirá a los usuarios elegir de forma manual qué modo desea utilizar para una mayor personalización.
Como apunte extra, y más orientado a los desarrolladores interesados en sacar el máximo partido a la tecnología WhiteMagic incluida en el Sony Xperia P, el fabricante aconseja abusar de colores blancos en la interfaz de las aplicaciones. Sucede todo lo contrario que en las pantallas de Samsung, que consumen menos energía con colores oscuros. En el caso de Sony no es así ya que para mostrar el blanco no es necesario que los tres subpíxeles rojo, verde y azul irradien a la máxima intensidad gracias al cuarto subpixel blanco.