Cuando compramos un móvil nuevo tenemos a nuestro favor una garantía que comienza a contar desde ese mismo momento de dos años de protección, o incluso de 3 años en los teléfonos comprados a partir del 1 de enero de 2022. Esto nos puede dar una cierta tranquilidad, pero a la vez no debemos olvidarnos de que la garantía no cubre todos daños que pueda sufrir el móvil, por eso queremos aclararte todas las dudas para que sepas donde están los límites que podríamos tener incluso para poder descambiarlo.
Antes de nada, debemos recordar que la factura o ticket de compra será importantísima para la garantía, aunque en muchos casos los fabricantes nos permiten conocer cuanta garantía tiene el móvil aún. Los papeles al fin y al cabo mandan, no podemos olvidarlo en ningún momento a la hora de solicitar una reparación o sustitución.
Nuevos periodos de cobertura
Como ya os veníamos contando, los tiempos de la garantía se han ido cambiando a lo largo del tiempo. Para que os quede mucho más claro, si comprasteis un smartphone antes del 1 de enero de 2022, por ley, tendréis 2 años de garantía. Sin embargo, a partir de esa misma fecha en adelante, la ley estipula que las compañías de móviles deben ofrecer 3 años de garantía.
Por otro lado, también se ha aumentado de cinco a diez años el tiempo durante el cual los respectivos fabricantes deben otorgar las piezas necesarias de repuesto. Incluso, cuando el teléfono en cuestión ya no se fabrique. De esta forma, los compradores tendrán una mayor seguridad ante cualquier imprevisto que pueda experimentar su smartphone.
Daños que cubre la garantía
Está claro que, a todos nosotros como usuarios, lo que más nos importa en todo momento es saber que, a la hora de que surja un problema en el móvil, la garantía del teléfono se hará cargo de la reparación y en poner a punto el smartphone para que vuelva a funcionar como el primer día. Sin embargo, las dudas que surgen a la hora de reclamarla no son pocas que digamos. Por ello, y para que lo tengas más claro que nunca, te diremos todos esos daños que la marca si podrá cubrirte en cualquier momento. Siempre y cuando tu dispositivo todavía siga estando dentro del tiempo establecido que ha fijado la firma de tu terminal.
Problemas de batería
Por ley, los fabricantes y comerciantes deben ofrecer dos años de garantía también en la batería (de hasta 3 años en los teléfonos comprados a partir del 1 de enero de 2022). Aunque, en otros muchos casos, algunas marcas se acogen a que la batería se comporta diferente al resto de componentes del móvil y podríamos tener problemas si se acogen a una reducción de la garantía.
Está en algunos casos puede llegar hasta los 6 meses (como en Xiaomi) haciendo que nos encontramos ante un problema para reclamar o bien optar por pagar la reparación. Para averiguarlo solo tenemos que consultar el tiempo que dura la garantía de la batería en cada móvil. O, también, nos pueden ofrecer solo 1 año como sucede en Apple.
Fallos de software
En caso de que no hayamos hecho root al dispositivo o no lo hayamos manipulado, cualquier problema relacionado con el software debe ser solucionado con el fabricante. Estos fallos no suelen aparecer y en su mayoría se solucionan con una actualización vía OTA. Sin embargo, podemos dar con una unidad defectuosa que contenga algún error puntual.
Tintes de color en la pantalla
Las pantallas de los móviles son el principal elemento que utilizamos y en varios casos hemos visto cómo aparecen fugas de luz o tintes de pantalla que entran en los límites de la garantía en móviles. El fabricante está obligado a cambiar el componente o darnos un nuevo dispositivo si no se muestra un daño producido por un mal uso. Debemos demostrar y hacer evidente que no se puede utilizar con normalidad el dispositivo debido a este defecto.
Accesorios que vienen en la caja
Aquellos accesorios, como adaptadores, cables o auriculares que vengan incluidos en la propia caja del terminal, también están dentro de esta protección o derecho que nos proporciona la marca del dispositivo. Sin embargo, el tiempo es muy diferente en cada fabricante. El periodo puede ir desde los 6 meses como es el caso de Xiaomi, hasta los 3 años, como es el caso de OPPO o Realme. Pero, en cualquier marca, sí que deberán ofrecer un tiempo mínimo.
Errores de fábrica
Por supuesto, una de las cuestiones que cubre la garantía y que son más comunes dentro de nuestro teléfono móvil, es la posibilidad de que nuestro móvil tenga un defecto de fábrica. Esta es un cuestión que no es culpa tuya, ni tan siquiera del propio fabricante, es un error que se ha dado y que deben solventar a la mayor brevedad posible.
Para que puedan descubrir este error y poner una solución al mismo, lo mejor es que contactes con el fabricante para que realice un diagnóstico al respecto y una vez hecho, que te realicen el intercambio en cuestión por un móvil sin errores.
El caso de Apple
Apple dentro de su programa Apple Care que podemos gozar de manera gratuita durante unos meses al momento de comprar un nuevo dispositivo, nos ofrece otras muchas opciones, pudiendo llegar a cubrir incluso casos de robos o de pérdidas del teléfono. Una razón para la que por supuesto, deberás cumplir varios requisitos como por ejemplo que tengas activado la función ‘buscar’ dentro de tu dispositivo.
Ahora bien, debemos tener en cuenta que una vez termine el periodo de prueba, tendrás que pasar por caja si lo que finalmente quieres es que la garantía que te ofrece Apple sea para siempre. Que teniendo en cuenta lo caros que son los teléfonos de Apple, no está nada mal respirar tranquilos con ellos en la mano.
Lo que no cubre
Entre todos los daños que no cubre de forma generalizada la garantía de nuestro móvil encontremos algunos muy comunes.
Por lo tanto, pasamos a conocer todos los daños que quedarán exentos de la garantía en caso de que el fabricante no haya indicado algo diferente. Estas modificaciones siempre serán a favor del consumidor, no tiene posibilidad de reducirlo en los 2 años estipulados por ley o reducir la protección.
Marcos y componentes externos rotos
Todo lo que compone el móvil y que queda al alcance de nuestra mano no será sustituido o entrará dentro de los límites de la garantía si se ha dañado por un golpe, caída o mal uso. Esto también afecta a la cámara y su cristal de protección que podría haberse arañado al guardarlo en el bolsillo o por otras muchas causas. Además de otras partes del smartphone, como podría ser la parte trasera o sus bordes.
Puertos USB, jack de audio…
La entrada de los móviles para cargarlo es uno de los aspectos que más debemos cuidar dado que su uso es prácticamente diario en todos los casos. Forzar la entrada del puerto podría provocar un daño que nos impida seguir utilizando y dado que proviene de un mal uso, no estaría en los costes que cubre la garantía. Lo mismo con el jack de audio, bandeja SIM o el resto de puertos de entrada y salida que podemos utilizar.
Pantalla rota
Esta es una de las razones principales que hacen que los móviles tengan que pasar por el servicio técnico, donde un alto porcentaje por no decir en todos los casos proviene de un mal uso. Esto hace que la garantía no tenga que cubrirlo al tratarse de un daño causado por golpes o incluso por arañazos.
ROOT al móvil
Aunque cada vez es menos popular, lo cierto es que rootear el smartphone es que no siempre está fuera de los límites de la garantía y aunque nuestro problema no derive del software, podrían echarnos hacia atrás la garantía.
Por ejemplo, si tenemos derecho a 2 o 3 años de garantía. Y durante el primero, hemos decidido hacer root en el móvil y al segundo ha comenzado a fallar. El vendedor o fabricante no podrá poner como escusa que ha sido por nuestra culpa. Por lo que, para negarse a reparar el teléfono o reemplazarlo, deberá acredita que el root ha sido la causa que ha estropeado el smartphone.
Por este motivo, solo se recomienda en terminales con más de dos años, o de tres años si lo compraste a partir de 2022, ya que al pasar este tiempo, ya hemos perdido el derecho a reclamarla.
Desbloquear el bootloader
Aquí hay un dilema más importante. Al igual que sucede en el caso anterior. Hay marcas, como Samsung, que en sus foros ha repetido en multitud de ocasiones que el hecho de desbloquear el bootloader viola la garantía del equipo. Sin embargo, en otras como Xiaomi, han ido confirmando con el paso del tiempo que sí seguirá estando protegido. Pero, la cosa no acaba ahí, si en el proceso de desbloquearlo, terminamos dañando o resulte en un brick, entonces, sí que perderemos el derecho de la garantía.
Robo o perdida
La garantía del móvil no es un seguro. Por lo tanto, en caso de que perdamos nuestro teléfono o nos lo roben, en ningún momento el fabricante será responsable y nos dará otro smartphone. En este caso, solo nos queda intentar encontrarlo e interponer denuncia con el número IMEI por si aparece.
Agua dentro del móvil
Uno de los apartados donde con más ‘mimo’ ponen los fabricantes a la hora de revisar los dispositivos es en este apartado. Aunque no lo sepas, todos los smartphones vienen acompañados de un indicador que les dirá si el teléfono ha tenido algún contacto con cualquier tipo de líquidos.
Además, ponen mucho cuidado en este sentido porque será determinante para saber si lo cubre o no la garantía desarrollada por la marca de tu teléfono. Aunque, ya te avisamos de que los daños por agua u otro tipo de líquidos no lo cubre la garantía de los móviles, incluso cuando son resistentes al agua. En algún caso concreto, como sucede en Samsung, dependerá de la evaluación técnica que realice su equipo.
Por ejemplo, si el dispositivo presenta golpes o daños cosméticos, nos dirán que ha podido entrar agua debido a que se ha roto el sello hermético que tienen sus smartphones. Pero, en otras marcas como Apple, ya nos avisan de primeras que no cubrirán en ningún momento si el iPhone se rompe al mojarse.
La extensión por parte de Apple
Aunque no es una garantía como tal, la compañía de Cupertino nos da la posibilidad de realizar una especie de ‘extensión’ a la garantía que nos da una enorme cantidad de añadidos, a lo que propiamente nos da la garantía gracias a su producto Apple Care; una herramienta que se encuentra a medias entre un seguro y una extensión de la garantía. Esto nos dará la opción de poder acceder a reparaciones gratuitas del teléfono en el caso de que haya sufrido algún tipo de problema o incluso a cambios de batería gratuitos en el caso de que su salud esté por debajo del 85%, lo que la deja en una posición muy crítica. Este plan de protección también nos dará la posibilidad de añadir protección contra robos y caídas en la versión Plus de este Apple Care.
Por supuesto esto no se trata de una herramienta gratuita, sino que tendremos que pagarla, aunque ciertamente no es un precio muy elevado para la cantidad de herramientas que ofrecen. Además, este precio irá en función del dispositivo que quieras cubrir, pero si es que deseas hacerte una idea, el plan máximo para el iPhone 14 Pro Max será de entorno a 350€ por dos años de cobertura, los cuales también podremos pagar mes a mes.
No experimentes con tu móvil
Ya hemos hablado de las posibilidades que nos da la garantía de nuestro teléfono móvil a la hora de los diferentes daños que cubre y que no nuestro para la reparación en el móvil, pero sí que es cierto que hay algunos casos en los que sí que se hace muy complicado que lo cubra; y será por supuesto por nuestra culpa y no por lo que pueda pasar con el smartphone. De esta manera, nos referimos sobre todo a la hora en la que queramos arreglar nuestro móvil por nosotros mismos cuando hemos detectado que existe algún problema y creemos que podemos hacerlo por nosotros mismos.
En este caso, no podremos abrir nuestro teléfono móvil en la tapa trasera para arreglar tu teléfono móvil, pues en ese mismo momento en el que quitamos los tornillos de nuestro teléfono para abrirlo, estaremos ante un smartphone manipulado, que pueden dar muy malos resultado. Y es que si conseguimos arreglar el problema, será lo ideal pero en el caso de que no consigamos arreglar el problema que se está dando en nuestro teléfono móvil y necesitemos llevarlo al servicio técnico, bajo ningún concepto conseguiremos que la garantía cubra la reparación por lo que nos tocará pagar.