El mercado de los smartphones está lleno de éxitos y dispositivos revolucionarios, pero también hay casos en los que las cosas no salen como se esperaba. Te contamos más sobre estas anécdotas aquí en MovilZona.
En ocasiones, grandes marcas lanzan productos que prometen cambiar las reglas del juego, pero terminan siendo un absoluto fiasco. Aquí repasamos algunos de los móviles que pasarán a la historia no por sus aciertos, sino por sus fallos, incluyendo un OnePlus, un iPhone y un Microsoft Surface.
El fracaso del OnePlus 9: los errores que marcaron su destino
El OnePlus 9 llegó con un gran punto a su favor: su colaboración con Hasselblad, una marca de cámaras legendaria. Sin embargo, la calidad fotográfica no estuvo a la altura ni por asomo. Aunque los colores mejoraron, las fotos nocturnas seguían teniendo más ruido que una señal espacio exterior, y el enfoque además fallaba, todo quedó en puro marketing, dejando a los usuarios muy decepcionados.
Uno de los golpes más duros llegó cuando se descubrió que OnePlus estaba limitando el rendimiento del dispositivo en aplicaciones como Chrome, WhatsApp o Twitter. Según la marca, esto se hacía para mejorar la eficiencia energética, pero esto se vio como un intento de ocultar debilidades o problemas del hardware. El rendimiento era claramente inferior de lo que debería.
Por si fuera poco existieron actualizaciones con errores que causaron problemas de estabilidad y una mala experiencia. Además, la integración con ColorOS confundió demasiado.
Otro fallo grave que no pasó infraganti fue la fragilidad del módulo de la cámara. Muchos usuarios informaron que el cristal protector se rayaba fácilmente, afectando la calidad de las fotos, supuestamente era un móvil premium.
OnePlus siempre fue conocida por ofrecer alta calidad a precios competitivos. Sin embargo, con el OnePlus 9, el precio subió sin justificarse con innovaciones reales. Esto rompió con la filosofía de la marca que además con la integración con Oppo tampoco ayudó a mejorar, comenzó a ser vista como una extensión de Oppo, perdiendo esa chispa que la hacía distinta.
iPhone 5c: el intento fallido de un iPhone barato
En 2013, Apple sorprendió al lanzar el iPhone 5c, su apuesta por un modelo más asequible con carcasa de plástico en lugar de aluminio. Aunque el concepto podría haber sido buena idea, el dispositivo no logró convencer ni a los usuarios ni a nadie, ya que su precio seguía siendo muy alto para la gama media, además de que era un retroceso en cuanto a prestaciones e incluso el iPhone 5s por poco más era mejor. El iPhone 5c quedó como un intento fallido de popularizar la marca, el éxito de Apple se basa en dar lo que nadie da, o en caso contrario los usuarios se marchan a otras marcas.
Microsoft Lumia 950: el hundimiento de Windows Phone
Lo interesante aquí fue que este intento de buque insignia de Microsoft se quedó en un intento sin mucha pasión. De hecho, fue un fracaso de los que no se recuerdan. E incluso Bill Gates recientemente ha comentado que se equivocó en no apostar por los móviles en su debido momento, y está claro que en este sector no vamos a recordar su mano.
Prometía llevar la experiencia de Windows 10 a los móviles, e incluso si lo conectabas a una pantalla, esta podría convertirse en un PC, pero la verdad es que fue limitada y poco práctica.
El Lumia 950 no solo marcó el fin de la línea Lumia, sino también el fracaso de Microsoft en el mercado móvil, consolidando a Android e iOS como los únicos sistemas operativos que realmente son funcionales.