Cuando uno se dispone a comprar un nuevo teléfono móvil entra en una disyuntiva bastante difícil de resolver. Esto se debe a la gran cantidad de aspectos que el usuario debe tener en cuenta, pero, sin duda, los procesadores son el componente más fundamental e importante por encima del resto.
La variabilidad que puedes encontrar entre los distintos smartphones del mercado no es excesivamente amplia. De hecho, la mayoría de los dispositivos suelen utilizar un Snapdragon o un MediaTek. En el caso de que lleven incorporado uno de los segundos, los móviles suelen contar con un precio más bajo que la media, pero ¿por qué ocurre esto exactamente?
Una razón sencilla
El motivo por el cual los terminales que poseen un procesador MediaTek tienen un coste menor que el resto es realmente sencillo de comprender. La clave se encuentra en que su producción es más barata en comparación con los fabricados por Qualcomm.
Esto, como consecuencia, conlleva que los teléfonos que lo traen integrado puedan encontrarse a un precio más económico para el usuario, como pude ser uno de los modelos de Pocophone más económicos, el POCO M4 Pro. Por esta razón es comprensible que sea la empresa que más chips vende.
¿Se sacrifica el rendimiento?
Muchos pueden pensar que el hecho de que el precio de sus procesadores sea excesivamente bajo se relaciona directamente con un escaso rendimiento, pero nada más lejos de la realidad. Las CPU diseñadas por MediaTek cuentan cada vez más con una productividad mucho mayor.
Hace unos días salió a la luz que el nuevo procesador de la compañía alcanzó en AnTuTu una puntuación nunca antes vista por parte de la compañía taiwanesa. El MediaTek Dimensity 2000 superó el millón de puntos de valoración superando así a algunos de los buques insignia de su principal competidora, Qualcomm. Supuestamente se encontrará disponible en ciertos móviles lanzados en 2022.
Actualmente también puedes toparte con casos realmente económicos y que gozan de un rendimiento considerable. El Xiaomi 11T, uno de los lanzamientos más recientes de la firma china, trae consigo un Dimensity 1200, al igual que ocurre con el OnePlus Nord 2. Esta es hoy por hoy la CPU más novedosa que podemos encontrar en la marca.
Es cierto que se trata de un procesador de gama alta, pero aun así el precio del teléfono de Xiaomi no se ve incrementado con creces. En concreto su precio ronda los 450 euros, una cifra no muy alta si tenemos en cuenta el resto de las propiedades del teléfono. Las pruebas confirman que el rendimiento del dispositivo con este procesador no tiene nada que envidiar a otros smartphones de diversas compañías, aunque sigue estando un escalón por debajo de su rival.