La batería se ha convertido en uno de los componentes esenciales a la hora de buscar un nuevo teléfono. Esto se debe principalmente a la gran cantidad de horas que utilizamos el dispositivo tanto para el trabajo como para el entretenimiento. Los smartphones se han convertido en nuestros fieles compañeros allá donde vayamos, por lo que siempre hay que procurar que no nos deje tirados.
Es cierto que los teléfonos móviles actuales poseen una autonomía excelente que nos permite utilizarlos durante varias horas, pero es probable que, en cierto momento, fruto de un despiste, se nos olvide cargar nuestro terminal antes de salir de casa o que la celda se gaste por un mal uso del teléfono.
Si esto ocurre existen distintas opciones para remediarlo. Una ellas es la que más se ha popularizado entre los usuarios, esta es, la batería portátil. Sin embargo, hay una alternativa más accesible en cuestiones de portabilidad, las fundas con celda integrada. De esta manera, conseguiremos que un móvil no se apague solo nunca más.
Una mayor portabilidad
El uso de este tipo de fundas no se ha extendido por encima de las baterías portátiles, pero una clara ventaja de ellas es no tener que llevar con nosotros un dispositivo más. Por lo que si no disponemos de espacio suficiente puede ser la opción ideal.
Otra propiedad de estas fundas es que a la misma vez que carga tu teléfono este se encontrará protegido frente a cualquier clase de daño imprevisto. Además, los materiales con los que se fabrican estas fundas son bastante más resistentes que las fundas convencionales.
Por último, el hecho de ser una funda conlleva que la carga sea inalámbrica. Esto quiere decir que no tendrás que preocuparte de que el cable pueda engancharse en algún lado. Además, puedes salir a hacer ejercicio con tu dispositivo mientras este se carga de manera simultánea.
Pocas opciones de personalización
La principal desventaja que muestran estos accesorios tiene que ver con aspectos relacionados con el teléfono. Contar con una funda con batería integrada puede suponer que nuestro teléfono se sobrecaliente en exceso, por lo que en verano es recomendable no hacer uso de ellos.
Otra desventaja se encuentra en el apartado estético. Como es obvio, la variedad de fundas con ese plus de energía no es tan amplia como el catálogo de las fundas tradicionales, por lo que las opciones de personalización de tu dispositivo se reducen considerablemente.
En términos de potencia las celdas portátiles cuentan con una mayor autonomía que las carcasas con batería. La causa de esto es su tamaño. Ser más pequeño implica menor energía, por lo que ya depende de si pretendes sacrificar potencia por mayor comodidad.
La cantidad de fundas con batería integrada están destinadas en su gran mayoría a iPhone, aunque también podemos encontrarlas por parte de Samsung. Sin embargo, no se presenta como una opción factible teniendo en cuenta la calidad y el tamaño de las nuevas baterías portátiles.