La única razón por la que no me compraría un reloj Suunto siendo runner

Los relojes inteligentes se han convertido en uno de los principales aliados de los amantes del deporte, pero especialmente para aquellos que acostumbran a salir a correr de manera habitual. De todas las marcas de relojes deportivos que hay, una de ellas llama la atención de muchos usuarios, aunque a nivel personal hay algo que no me termina de convencer en sus smartwatches. Hablo de los relojes Suunto.
Suunto es una marca que lo tiene todo para enamorar a los runners, desde un diseño resistente y bonito hasta una alta precisión en sus sensores, junto con una batería de larga duración. Sin duda, son relojes inteligentes que están pensados para los que se pierden durante horas por la montaña y también para los que salen a correr por el parque. A priori, parecen una de las principales alternativas a tener en cuenta, pero no hay que dejarse engañar por las apariencias.
El talón de Aquiles de Suunto
La verdad es que los relojes de Suunto no están mal, aunque al comprar un smartwatch también hay que tener en cuenta lo que esconde en su interior, es decir, el software. Todas aquellas funciones de salud y mediciones que permite ejecutar, así como su interfaz, apariencia, configuración y personalización. Y es aquí donde los relojes de Suunto dejan bastante que desear, algo que se vuelve aún más evidente cuando se comparan con competidores directos como Garmin o Polar, que sí ofrecen un ecosistema más completo y cuidado en todos estos aspectos, incluyendo una app móvil más intuitiva y versátil.
Cuando uno compra un reloj deportivo inteligente se espera que incluya características avanzadas que permitan llevar un control y seguimiento preciso de la información, como la oscilación vertical al correr, el tiempo de contacto de la pisada en el suelo, el estado de recuperación… pero no hay nada de eso. Ni tampoco planes de entrenamiento. Sí, claro que proporciona información sobre la carrera, aunque los datos no se acercan a los relojes de otras marcas.
Otro de los grandes problemas del software de los smartwatches de Suunto es que no cuenta con algunas de las funciones más básicas de un reloj inteligente. Entre ellas, algunas como los pagos NFC o reproducción de música. La personalización también brilla por su ausencia, así como la posibilidad de descargar nuevas aplicaciones para tu entrenamiento. Esto limita en gran medida su uso como reloj inteligente diario y lo relega únicamente al ámbito deportivo más básico.
¿Son una buena opción?
Personalmente, pienso que hay mejores marcas. Sin embargo, hay que admitir que Suunto está algo más enfocada a la durabilidad y no tanto a la medición de entrenamiento tan avanzada que hay en los relojes de marcas como Garmin o Polar. Si lo que buscas es llevar un control de tus tiempos, mejorar a largo plazo, planificar tus sesiones y llevar a cabo un análisis a fondo de todo tu entrenamiento, deberías apostar por estas últimas marcas. Son las mejores para los que ya están acostumbrados de sobra a salir a correr.
Los relojes de Suunto son buenos para actividades al aire libre de larga duración. Algunos de sus modelos destacan por una alta precisión GPS y una batería sensacional que permite estar fuera mucho tiempo sin necesidad de depender del cargador. También son ideales para aquellos que quieren centrarse en la actividad y no estar pendiente del teléfono, puesto que algunos no cuentan con un sistema de notificaciones avanzado.