Desde hace varias generaciones el comportamiento que ofrecen los smartphones de la gama alta de Samsung es bastante buena. Hemos probado el Samsung Galaxy S20 FE para conocer si se mantiene este comportamiento, y lo cierto es que hay cosas a comentar que son de los más interesantes.
Lo cierto es que las perspectivas son buenas al conocer el hardware del Samsung Galaxy S20 FE, ya que incluye componentes que no son excesivamente exigentes en lo que tiene que ver con las necesidades energéticas que tienen. Un ejemplo de lo que decimos es su pantalla Super AMOLED de 6,5 pulgadas y, también, el procesador Snapdragon 865 (este, gracias entre otras cosas as a su tecnología de fabricación de siete nanómetros).
A esto hay que sumarle que la carga de la batería integrada es de 4.500 mAh, un amperaje de lo más importante para un teléfono que tiene un peso de sólo 190 gramos y que cuenta con un grosor de sólo 8,4 milímetros. Por lo tanto, el trabajo realizado para ofrecer el máximo posible sin hipotecar la ergonomía es muy bueno.
Una muy buena autonomía en el Samsung Galaxy S20 FE
Aparte de conseguir superar un día de uso sin cortarse a la hora de recibir correo y revisar páginas web, lo que ya es positivo, este terminal nos ha gustado mucho (y sorprendido) debido a que los tiempos de uso utilizando la pantalla con 120 Hz son similares a los que hemos obtenido con otros modelos que sólo llegan a los noventa: superan las 15 horas al utilizar de forma constante el terminal. Esto le hace ser una de las mejores opciones del mercado si buscas un equipo que tenga un refresco tan alto sin que la autonomía se vea afectada de forma negativa.
En las pruebas en las que medimos el tiempo que se puede ver vídeos sin tener que recurrir a un enchufe para el Samsung Galaxy S20 FE, de nuevo hemos conseguido marcas de lo más interesante, superando sin problemas las trece horas y, por lo tanto, este es un modelo perfecto para los que pasan mucho tiempo fuera de casa y el uso de una pantalla Super AMOLED parece un acierto pleno… al menos en lo que tiene que ver con la autonomía. Además, esto también es importante, el drenaje de energía sin estar en uso es muy bajo… siendo de lo mejor que hemos visto hasta la fecha en este aparrado.
Sin problemas en la carga de la batería
Ni le falta carga rápida al Samsung Galaxy S20 FE, que por cierto está perfectamente controlada en lo que tiene que ver con la temperatura. El caso es que este teléfono admite trabajos con hasta 25 W de potencia, donde hemos encontrado que se llega a un decente 55% en treinta minutos de proceso. Eso sí, hemos tenido que dar uso a un cargador adicional, ya que con el dispositivo se incluye un de 15 W. Algo que se debe tener en cuenta.
Un par de características que nos ha gustado mucho de este modelo es que por un lado permite carga reversible, por lo que se puede dar suministro energético a otros dispositivos que soporten algo que es un excelente detalle del Samsung Galaxy S20 FE: permite carga inalámbrica de hasta 15 W (con un correcto control del calor). Y, lo cierto, es que hemos comprobado que el comportamiento es perfecto con todos dispone de cargadores de terceros. El caso es que la opinión que nos has dejado este terminal en lo que tiene que ver con la autonomía es bastante buena, ya que ofrece un tiempo de uso amplio y una gran cantidad de opciones que le hacen ser completo. Un terminal recomendable aquí.