Quedan apenas tres semanas para que Apple presente oficialmente sus nuevos teléfonos para este 2018, que se esperan sean tres de nuevo. Uno de ellos precisamente conservará la pantalla LCD. Ahora conocemos que Apple se estaría planteando cambiar la tecnología de la pantalla de los iPhone por una mucho más eficiente, vamos a conocer por qué.
Parece que Apple podría estar cerca de comenzar un súper ciclo en la que podría volver a batir récords de ventas, sólo basándonos en la tasa de reposición de sus teléfonos, que podría crecer de nuevo de forma dramática y mejorar exponencialmente los resultados de Apple.
Apple se plantea cambiar la tecnología de pantalla de los iPhone
El año pasado Apple estrenó por fin en el iPhone X la tecnología de pantalla OLED en un móvil de la firma, un hito que se extenderá este año al iPhone X Plus, el modelo más grande que se estrenará dentro de poco. Mientras que el conocido como iPhone barato, el que sería el iPhone 9, heredaría el diseño del iPhone X, aunque con una pantalla LCD como las que ha venido utilizando la marca en los últimos años en sus iPhone.
Ahora hemos conocido una nueva información de que Apple se está planteando cambiar la tecnología de sus pantallas más allá de estos términos. Así lo sugiere un informe de la firma de analistas IHS Markit que apunta a que Apple está planteándose cambiar sus actuales paneles LTPS TFT por otros nuevos LTPO en sus pantalla OLED. Se trata del panel trasero de la pantalla que se encarga de encender y apagar en el momento adecuado los píxeles de esta, por lo que es un elemento clave a la hora del consumo de energía por parte del teléfono.
Y esa es la principal razón por la que Apple se plantea este cambio en la tecnología de sus pantallas, para que los iPhone consuman menos batería. Esta tecnología LPTO puede consumir entre un 5 y un 15% de energía menos que las actuales pantallas OLED de Apple, aunque a día de hoy tienen aún algunos puntos en contra muy importantes. Como que los transistores de esta tecnología son más grandes, por lo que habrá menos en la pantalla y por tanto capaz de mostrar resoluciones inferiores, además, en conjunto, los componentes son más costosos. Apple se estaría planteando probar esta tecnología en las pantallas del Apple Watch, para después dar el salto las del iPhone tras comprobar los beneficios. Por lo que habrá que esperar como mínimo a los modelos de 2019 para poder verla en los teléfonos.