La evolución de la memoria RAM en los smartphones ha sido motivo de debate desde hace unos años. Si bien la actualización hasta los 2 GB parecía razonable, la llegada de módulos de 4 GB y durante 2016 los chips de 6 GB hacían preguntarse acerca de si era más una herramienta de marketing de los fabricantes o pura necesidad técnica. Ahora, a principios de 2017, los smartphones con 8 GB ya son una realidad y se espera que a lo largo del presenta año lleguen otros tantos más como el Samsung Galaxy S8. ¿Para qué queremos “tanta” memoria RAM en un teléfono? La realidad virtual empieza a darle sentido.
Para los menos experimentados será un número más que, de forma superficial, denote que se trata de un smartphone de alta gama, un terminal potente. Para otros, tal vez sigan apuntando hacia una mera estrategia comercial. Sin embargo, la actual situación del mercado no es la misma que hace unos años y ahora sí, los smartphones con 8 GB de RAM empiezan a ser más una necesidad.
2017 arranca con los primeros smartphones con 8 GB de RAM
El CES de Las Vegas no ha sido especialmente interesante para los amantes de los smartphones por la escasez de novedades. Sin embargo, en el marco de la feria tecnológica se ha producido la presentación del ASUS Zenfone AR, un modelo que destaca por encima de todo por contar en su interior con 8 GB de RAM. No será el único modelo que veamos con esta especificación puesto que ya se escucha que el Samsung Galaxy S8 será el siguiente, aunque habrá más.
Una novedad que ya esperábamos puesto que la propia división de Samsung encargada de fabricar memoria volátil ya anunciaba en octubre de 2016 la tecnología necesaria para la fabricación de este tipo de módulos de memoria RAM DDR4 y a la que también se suma Hynix, tal y como se ha podido saber recientemente.
El software hará útiles esos 8 GB de RAM
Si hace unos años había dudas de si era posible aprovechar la memoria RAM, en 2017 la respuesta es sencilla. La memoria RAM es una de esas características más valiosas hoy por hoy en un smartphone y lo es principalmente por su acometido. Aunque el kernel de Android está diseñado para gestionar la memoria RAM disponible en todo momento, liberando procesos en segundo plano para priorizar la carga de trabajo de apps que lo requieren en tiempo real, empezamos a utilizar apps que son mucho más exigentes y “tragonas”. Por ese motivo el sistema se ve cada vez con más a depurar y priorizar la RAM hasta el punto que, donde antes estaba hasta desaprovechada, de ahora en adelante será imperiosa la necesidad de más memoria.
El motivo no es otro que el desarrollo de apps cada vez más complejas y exigentes, pero también a la resolución de la pantalla. Más resolución requiere más memoria y más velocidad (BUS) para canalizar los datos procesados por el SoC y aquí la realidad virtual tendrá mucho que decir.
El peso de la realidad virtual
Del mismo modo que la llegada de las primeras pantallas 4K eran muy criticadas puesto que no se creían útiles, resulta que tanto la resolución de la pantalla como la cantidad de memoria RAM serán características vitales para ofrecer una plena experiencia de uso de la realidad virtual. La primera porque lo será para que el usuario perciba una calidad de imagen aceptable a gran tamaño. La segunda, para ser capaz de soportar la cantidad de datos y ancho de banda que requieren este tipo de tareas.
Sin embargo, existe otra razón por la que los smartphones con 8 GB de RAM serán más una necesidad que una maniobra de los fabricantes para vender. Aunque Canonical y Microsoft ya lo intentaron, Android podría finalmente lograr que el smartphone fuera ese dispositivo multitarea capaz de convertirse definitivamente en un PC con ayuda de un monitor externo. En este sentido, el Samsung Galaxy S8 se posiciona como el modelo más destacado para abrir paso a esta nueva tendencia.
Así, el usuario dispondría de una plataforma -software- capaz de ofrecer una multitarea más efectiva, más aprovechable, a través de un monitor de mayores dimensiones que las que ofrecen los phablet más destacados. El mundo de posibilidades de este software será mayor y más exigente con el hardware, donde nuevamente la memoria RAM será de vital necesidad si queremos que el sistema operativo fluya con garantías.