La semana pasada hablábamos de las aplicaciones para ligar en el fin de semana que se avecina, pero la que descubrimos hoy es una vuelta de tuerca más a este concepto. Se trata de Lulu y está causando furor en el ámbito universitario americano. ¿Su secreto? El hecho de que está dirigida a las mujeres que, anónimamente, ponen nota a sus novios, y sobre todo a sus ex-parejas.
Disponible para iOS, aunque en este caso sólo en EE.UU., y para Android, Lulu es una de las redes sociales más peculiaress que te puedes encontrar. Y es que se trata de una red social en la que son los chicos los que se abren el perfil, pero las que mandan son las mujeres.
A través de cuestionarios tan típicos como los de la revista Cosmopolitan – ojo, que lo dicen los propios creadores de la aplicación -, las chicas dejan sus opiniones sobre los hombres que conocen y con los que han tenido relación. Eso si, es el chico el que tiene que abrir su perfil y esperar a que lleguen las notas, a las que pueden estar asociados hashtags como #JustFriends, #WanderingEye, and #DoesHisOwnLaundry.
La premisa de esta red social es interesante, ya que para ellos supone una exposición total a las «reviews» de las chicas, a cambio de una forma más de entablar amistad – o de conseguir ligar más, para que vamos a engañarnos – y a ellas les vale para conocer de primera mano y anónimamente, opiniones de las que han estado ya en contacto con ellos.
¿Se puede evitar el abuso?
Ahora bien, ¿qué impide que esta red social se desmadre y se llene de comentarios despechados? Según indican desde la propia aplicación, poco pueden hacer. Ellos, es cierto, que se someten voluntariamente al escrutinio de las féminas, y se contrastata que no se crean perfiles falsos mediante la sincronización con la cuenta de Facebook, pero más allá no hay nada que lo controle, a parte de volver a darse de baja.
Las universidades europeas el próximo paso
Su creadora, Alexandra Chong, afirma que una de cada cuatro universitarias en EE.UU. utiliza la aplicación desde su lanzamiento en 2013 y su evolución en el tiempo le ha llevado a añadir un aspecto de «centro de citas», en el que ellas tienen que dar el primer paso siempre ya que los chicos sólo pueden contestar mensajes, nunca enviarlos en primera instancia.
El último paso de Lulu ha sido el de permitir a los hombres la posibilidad de consultar su «puntuación», cosa que no podían hacer antes del verano. Y aunque su ámbito de actuación es aún EE.UU., los planes de la compañía tras el éxito es ampliar la «cobertura» pronto a Europa y extenderse por los campos universitarios del Viejo Continente.