Esta es una aplicación que ofrece la posibilidad de asistir a conciertos desde un terminal con sistema operativo Android. Además, tiene la virtud de incluir una excelente base de datos, por lo que es muy complicado que no encuentres alguno que te guste entre la gran cantidad de actuaciones que puedes encontrar en iConcerts.
Uno de los detalles que llaman la atención de esta creación de Transmedia Korea es que ocupa muy poco espacio en el terminal correspondiente, como demuestra que la descarga es de sólo 3,72 MB. Por lo tanto, es posible utilizarlo n casi cualquier terminal ya que, sumado a esto, se encuentra que el sistema operativo que se debe tener instalado es Android 2.2 o superior… algo que es ya muy común.
Una vez que se descarga iConcerts desde este enlace de Samsung Apps, el proceso de instalación es el habitual, por lo que no hay pérdida posible. La pantalla principal que aparece en el inicio muestra las recomendaciones que existen en ese momento, haciendo referencia a los conciertos más interesantes ya sean por visionados o por ser muy nuevos. Lo normal en este tipo de aplicaciones en el que existen contenidos.
Si alguna de las que hay se cree que es interesante, con pulsar encima de ella ya está todo hecho, por lo que el manejo es de lo más intuitivo. Además, esta es la forma de proceder en todos los apartados del programa, por lo que es un protocolo que se aprende de forma rápida. Lo mismo ocurre cuando aparece el vídeo a reproducirse, con sólo presionar sobre el símbolo de Play se comienza a ver el contenido (en formato horizontal, para aprovechar al máximo la pantalla del dispositivo). Por cierto, cuando el desarrollo esté traducido al español, será la guinda del pastel.
En todos los apartados de iConcerts es posible pulsar el botón Menú y aparece una serie de opciones (Home, Playlist, Search, My Account y Help) para acceder a todos los rincones de la aplicación de una forma muy rápida y directa. Una mención especial hay que decir a la cuenta: hay que registrarse para utilizar el programa, lo que no cuesta anda, pero sí es cierto que algunos conciertos (o aparte de ellos) así como diferentes opciones sólo están disponible al convertirse en usuario Premium, lo que vale 4,99 $ al mes.
Buena calidad de las reproducciones y rápido acceso a los contenidos
La calidad de los vídeos que se reproducen con HD en la mayoría de los casos, por lo que se ven perfectamente. El sonido, por su parte, es muy bueno por lo que el conjunto multimedia está muy cuidado (hay algunos contenidos antiguos que no dan más de si por la propia fuente). Por lo tanto, si se decide sacar la imagen a un televisor mediante la conectividad HDMI, no hay problema en tener una gran calidad. Eso sí, no hay muchas opciones de configuración en este apartado.
Por cierto, una vez se selecciona lo que se desea ver es posible conocer todas las pistas que componen el concierto y, también, cierta información al respecto. Esto sirve de almanaque interesante para conocer lo que “esconde” el vídeo que se está reproduciendo y le dota de más valor a iConcerts.
Para acceder a los contenidos existen diferentes formas de realizar las búsquedas. Pulsando sobre la opción Search (buscar) se accede a un aparado en el que se puede introducir una cadena de texto, que puede ser el título de una canción o el nombre de un cantante, par que aparezca todo el contenido existente. Los otros dos apartados son Artist, en el que existe una lista por orden alfabético, y Genres, donde se puede buscar por los géneros musicales que se desee escuchar en cada momento.
Otras opciones que son interesantes en iConcerts son Playlist, que permite configurar listas de reproducción (hay algunas creadas por defecto) y una apartado de Ayuda (Help) en el que se puede conocer cada recoveco de la creación, pero está en inglés.
Una opción muy interesante iConcert, ya que permite ver y escuchar conciertos en directo (vía streaming) con una calidad más que buena y con un uso muy sencillo (pese a estar inglés, no hay problema en este aspecto). Eso sí, para sacarle el máximo partido lo ideal es darse de alta y pagar la cuota mensual, como bien ocurre en Spotify, sin ir más lejos.