No es que lo vayas a hacer siempre porque seguramente tengas el propio cargador de móvil, pero te puede surgir la ocasión de que vas a casa de alguien y necesitas cargar el móvil o no encuentras su cargador, pero sí otro. En este caso, te habrás dado cuenta de que la potencia de carga es superior que la que soporta tu móvil y tienes miedo a que se acabe dañando o explotando. Es algo que nos ha pasado más de una vez y te contamos lo que nos ha pasado cuando lo hemos hecho.
Teniendo en cuenta que es algo que ha sucedido en alguna ocasión, o eso es lo que habrás escuchado en las noticias, aunque más bien con ordenadores o con otros dispositivos, tendrás miedo a que usar una potencia de carga superior afecte a tu móvil o le pase algo. Al fin y al cabo, siempre recomendamos usar un cargador original con la misma potencia de carga o el que ya te venía con el móvil si lo tenía en la caja. Y si es la misma tecnología de carga mejor porque así aprovecharás al máximo el potencial de carga de tu teléfono. Por eso, respondemos a un miedo muy extendido, que es lo que pasa si usas un cargador con más potencia.
No temas, no hay serios peligros
Por ejemplo, tienes un móvil con una carga rápida de 33W, pero no encuentras tu cargador. Sí que está el de tu pareja o algún colega, que tiene una potencia de carga de 67W. Ante esto, dudarás y no sabrás qué hacer. Tampoco es cuestión que por una urgencia, o no pasar unos minutos buscando más, se nos vaya a romper el móvil, estropear la batería o incluso explotar. Hay mucho desconocimiento al respecto y el miedo puede apoderarnos.
Los cargadores, aunque tengan una potencia superior, se adaptan a nuestro teléfono para darles la potencia que necesitan. No van a darle más, por lo que si pensabas que le iba a afectar de alguna manera no es así. Tampoco va a cargar más rápido. No pienses que por usar un cargador más potente vas a tenerlo antes cargado porque no es así. Si tu smartphone tiene una entrada de energía máxima de 33W, esto es lo que va a recibir del cargador aunque este tenga mayor potencia. Lo mismo si es móvil con carga rápida de 67W o de 80W, por mucho que uses un cargador de 120W no va a cargarse en 17 minutos.
No tienes que hacer nada para que esto sea así, porque los cargadores se adaptan automáticamente a la demanda de tu móvil. Eso sí, para que no le pase nada debe ser un cargador original o que tenga todas las medidas de seguridad necesarias para una carga segura. También debe ser un cargador de calidad, porque puede darse el caso de que tenga una potencia muy grande y no pueda dar menos energía que una superior a la de tu móvil. En este caso no funcionará, pero es por el propio cargador que no es capaz de llegar a una carga tan baja.
Por su parte, que este tenga mayor o menor potencia que tu móvil no vas a tener problemas porque este tomará más o menos potencia según sus requerimientos sin dañarlo ni provocar fallos de funcionamiento. Puedes usarlo perfectamente cuando lo necesites, incluso habitualmente, aunque siempre es mejor optar por un cargador de calidad que se ajuste a tu teléfono.
¿Y un móvil rápido a un cargador lento?
En estos casos, tampoco se te va a estropear el móvil ni nada parecido, lo que sucede es que el móvil y el cargador se comunican para negociar la velocidad de carga adecuada. El móvil limita la potencia de carga que recibe del cargador a la que este último puede proporcionar, evitando así cualquier riesgo de daño.
En otras palabras, el móvil se protege a sí mismo utilizando solo la corriente que necesita, independientemente de la potencia del cargador. Esta comunicación inteligente entre ambos dispositivos asegura que el móvil no reciba más energía de la que puede manejar, preservando su integridad y funcionamiento óptimo y que ni explote ni nada parecido que hayas oído.
Por supuesto, la carga será más lenta. Tardarás más tiempo en cargar tu móvil por completo, ya que el dispositivo toma solo la cantidad de energía que necesita, sin excederse, incluso si el cargador tiene la capacidad de proporcionar más potencia. Pero, a pesar de la menor velocidad de carga, no hay riesgo para el móvil. Puedes usar un cargador lento sin preocuparte por dañar tu dispositivo. Además, la batería del móvil no se verá afectada negativamente por usar un cargador lento, lo que garantiza la seguridad y durabilidad del dispositivo durante mucho tiempo.