Todavía no comprendo cómo siguen estrenando móviles con notch en la parte superior de la pantalla. Las excusas de los fabricantes ya no sirven para nada, puesto que hay modelos económicos que ya se han deshecho de él por completo. Sin embargo, parece que se empeñan en su desarrollo pese a que los usuarios están cada vez más hartos.
La presencia del notch lleva acompañándonos desde hace tiempos inmemoriales, pero, en pleno 2025, su existencia debe llegar a su fin. Es un elemento molesto que arruina el diseño frontal de los dispositivos, mientras que las marcas se escudan en diferentes razones para que todavía siga siendo una alternativa.
El notch ya no vale
El notch ha quedado relegado a los móviles de una gama más económica, pero cada vez resulta más común ver cómo hay smartphones baratos que prescinden por completo de esta condición. Un claro ejemplo es el Redmi Note 14, el cual se puede encontrar en la actualidad por unos 150 euros, entonces ¿por qué hay fabricantes que siguen añadiendo el notch a la pantalla si está demostrado que no es estrictamente necesario? Es una característica anticuada que ocupa un lugar innecesario en la pantalla y que no tiene funcionalidad alguna en el teléfono. Es hora de evolucionar y dejar atrás esta moda.
Entiendo que los costes de fabricación de estos móviles con notch son más económicos, pero la tecnología y la calidad de las cámaras frontales bajo la pantalla ha evolucionado tanto a lo largo de los últimos años que la diferencia de precios no es tan grande y la rentabilidad que pueden obtener las marcas es bastante amplia. Es por ello por lo que el notch debe desaparecer más pronto que tarde.
Cuánto tiempo de vida le queda
Decir una fecha exacta para la desaparición completa del notch resulta complicado. Pese a que cada vez son menos los móviles baratos que lo tienen, es probable que falten unos cuantos años hasta que deje de existir. Sería razonable pensar que todavía le quedan 5 años aproximadamente, pero no sabemos cómo puede evolucionar la tecnología hasta entonces. Los últimos años se han caracterizado por una velocidad impresionante, así que lo más seguro es que se ralentice algo durante los próximos.
Además, es una decisión que favorecerá a las marcas, ya que los móviles con notch cuyo precio rondan los 100 euros no tienen nada que hacer contra otros modelos de 150 euros que presumen de una pantalla con una experiencia visual mucho más inmersiva. Antes, había smartphones de 300 euros que tenían notch, puesto que, anteriormente, su ausencia era una cualidad relegada a los dispositivos de gama alta. Ahora, hay muchos móviles que ya carecen de notch y el escalón de los 100 euros debe ser el próximo objetivo.
Principalmente, para que todas aquellas personas que buscan un móvil lo más básico posible también puedan disfrutar de una pantalla de calidad donde ver el contenido. No sabemos cuándo desaparecerá, pero estamos seguros de que su tiempo de vida es más corto que nunca.