Cuando tratan de vendernos un teléfono móvil, la carrera por los megapíxeles parece no tener fin. Cada año, los fabricantes nos sorprenden con smartphones que prometen fotografías de una calidad nunca antes vista, gracias a sensores de imagen con cientos de millones de píxeles. Sin embargo, ¿es realmente la cantidad de megapíxeles el factor determinante para obtener una buena fotografía?
Dicho de otro modo, ¿un móvil con cámara con 50 Megapixeles es buen0 o es mal0? Pues ni lo un ni lo otro. Realmente a la hora de valorar una cámara, no debe hacerse solo por los MP de su sensor, sino por otras muchas cosas como su ISP o procesador de imagen, el tamaño del propio sensor, el número de lentes, la apertura de las mismas o el software de post procesado, por citar algunos ejemplos.
Más allá de los números: el tamaño sí importa
Si bien los megapíxeles nos indican la cantidad de información que un sensor puede capturar, no son el único factor a considerar. De hecho, existen otros elementos mucho más relevantes para la calidad de una imagen, como el tamaño del sensor y la apertura del objetivo.
- Tamaño del sensor: Un sensor más grande es capaz de captar más luz, lo que se traduce en imágenes con mayor menos ruido y una mejor representación de los colores. Además, los píxeles individuales de un sensor más grande suelen ser más grandes, lo que mejora la calidad de la imagen, especialmente en condiciones de poca luz.
- Apertura del objetivo: La apertura, medida en números f, determina la cantidad de luz que llega al sensor. Una apertura más grande (un número f menor) permite captar más luz, lo que es ideal para fotografías con poca luz o para conseguir un efecto de desenfoque del fondo.
- Software: el cerebro detrás de la cámara El software que acompaña a la cámara juega un papel fundamental en el procesamiento de las imágenes y es el responsable de mejorar la calidad de las fotografías, reduciendo el ruido, optimizando los colores y aplicando diferentes efectos.
- Procesador: el motor de la cámara del smartphone es el encargado de ejecutar los cálculos necesarios para procesar las imágenes y ejecutar las diferentes funciones de la cámara. Un procesador potente permite un procesamiento más rápido y eficiente de las imágenes, lo que se traduce en una mejor experiencia de usuario.
- Número y tipo de lentes: El número y tipo de lentes que incorpora un smartphone influyen directamente en su versatilidad. Un sistema de cámara que cuente, por ejemplo, con un Ultra gran angular y un teleobjetivo permite capturar diferentes tipos de imágenes, desde grandes escenas hasta primeros planos.
Los líderes en fotografía móvil tienen cámaras de 50 MP
El mejor ejemplo que podemos darte para que veas por ti mismo si una cámara de 50 MP es buena o no, es echar un vistazo a los smartphones mejor valorados en fotografía móvil, como los Huawei P70 Pura, el Google Pixel 9 Pro XL, o el iPhone 16 Pro Max.
Estos móviles, los mejor valorados por los expertos de DxOMark, tienen en común el no contar con un sensor de más de 50 megapíxeles. Los dos primeros lo tienen de 50, mientras que el smartphone de Apple repite con un sensor de 48 MP. De esta forma, estos dispositivos, considerados la crème de la crème de la fotografía móvil, demuestran que una alta resolución no es sinónimo de una buena cámara.
En cambio, estos teléfonos destacan por la calidad de sus sensores, la optimización del software y la excelente puesta a punto de sus sistemas de cámara. Gracias a esto, son capaces de capturar fotografías con un nivel de detalle, nitidez y realismo impresionante, incluso en condiciones de iluminación difíciles.
Es cierto que te vas a encontrar con móviles con cámaras de 50 MP que no hagan bunas fotos, pero, como decimos, eso no será culpa de la resolución del sensor, sino de su tamaño, sus lentes y el resto de variables que afectan a la calidad final de una captura que hemos repasado unas líneas más arriba.
Entonces, ¿Por qué muchos fabricantes apuestan por los megapíxeles?
Si los megapíxeles no son tan importantes como creemos, ¿por qué los fabricantes siguen incluyendo sensores de alta resolución en sus smartphones? La respuesta es muy sencilla: marketing. Un número grande y llamativo, como 200 megapíxeles, atrae la atención de los consumidores y crea la ilusión de un producto mejor.
Lo que sí es cierto, más allá del marketing, es que los fabricantes pueden utilizar los megapíxeles para ofrecer funciones extra, como el zoom digital sin pérdida de calidad o la posibilidad de capturar imágenes de muy alta resolución para imprimir en grandes formatos. Sin embargo, para el día a día es mejor contar con sensores de mayor calidad que de mayor resolución.