Aunque con casi total seguridad este mismo año podremos volver a ver imágenes como la que encabeza este artículo a partir del 16 de septiembre, este año hay algo que va a cambiar en la estrategia comercial de Apple. Tras la ligera decepción que ha supuesto la presentación del nuevo iPhone, así como las críticas a sus precios podrían haber provocado que Apple haya decidido no mostrar las habituales cifras de las ventas iniciales del iPhone 7.
Más allá de hablar de las especificaciones, opiniones, pros y contras de los nuevos iPhone 7 y iPhone 7 Plus, es oportuno señalar cómo impactará el lanzamiento de los dispositivos a unos resultados económicos del fabricante ligeramente resentidos en los últimos meses. A ello hay que sumarle el jarro de agua fría que ha supuesto la sanción impuesta por la Unión Europea a Apple por una posible «evasión» de impuestos en Irlanda.
Sin embargo vamos a tener que esperar más tiempo de lo normal para conocer cómo será recibido el nuevo iPhone 7 por la comunidad tecnológica, pues desde Cupertino en esta ocasión no se va a dar importancia a las cifras de venta iniciales.
Y es que Apple ha decidido dejar de revelar cuántos iPhones se venden durante su periodo de preventa inicial y primer fin de semana. La compañía argumenta haber tomado esta decisión avisando que el iPhone 7 se va a vender muy bien, pero hemos llegado a un punto en que las cifras de ventas iniciales «ya no es una métrica representativa» de la demanda y puede ser un indicador engañoso para los inversores de la marca.
En declaraciones a la CNBC donde la compañía avisa de esta nueva estrategia, Apple también reiteró su pronóstico de ganancias para el trimestre que termina a finales de octubre.
¿Miedo o prudencia?
Realmente no se le puede quitar razón a la compañía acerca de lo poco representativas que son las cifras de venta iniciales de un dispositivo, unas cifras que muchas otras marcas anuncian a bombo y platillo meses antes de ver como los resultados económicos no son todo lo potentes que podría esperarse en base a esos números.
Sin embargo no podemos dejar de pasar por alto que en los últimos meses la disminución de las ventas del iPhone es un hecho, y podría existir una cierta preocupación sobre las primeras ventas del iPhone 7, con el golpe que ello supondría al departamento de marketing de Apple.
No obstante, y aunque no podemos adivinar el futuro, es de esperar que si el iPhone 7 batiera récord de ventas en las primeras semanas de comercialización la compañía se encargaría de anunciarlo sin ningún problema.