Cada vez se va imponiendo que más megapíxeles no hacen a una cámara mejor y que lo que hay que ver son otras muchas cosas para encontrar diferencias y similitudes. No vamos a entrar a continuación si una es mejor u otra es la peor, de eso ya se encargan otros como DxOMark, lo que nos interesa ver a continuación es cómo de diferentes son las cámaras del Galaxy S6 y del iPhone 6s más allá de que una tenga 16 MP y otra 12 MP.
Y es que esta respuesta nos la da la última e interesante comparativa que ha hecho Phone Arena en la que, además de con una larga explicación, nos muestran gráficamente lo que supone hacer una foto con uno u otro móvil.
El ratio de aspecto, algo de lo que se habla poco
Y es que debido a que ambos tienen pantallas muy diferentes, las fotos que hacen también lo son. A diferencia de en los tablets, donde se ha ido imponiendo el ratio 4:3 del iPad, que también tienen los iPhone pese a aumentar sus pantallas, en los teléfonos sigue habiendo disparidad y sin ir más lejos, el Samsung Galaxy S6 mantiene un ratio de 16:9, lo que también se conoce como el «panorámico».
Eso no sólo influye en las fotos que vemos, sino que los fabricantes optimizan sus cámaras para actuar sobre esos tamaños. Y esa es una de las razones que hay en la diferencia de las cámaras de estos dos equipos, que uno toma unas fotos en un ratio y el otro, en el propio.
Ahora bien, y antes de que los partidarios de Samsung echen las campanas al vuelo, la imagen de arriba es algo tramposa porque no tiene en cuenta las longitudes focales de ambos terminales. En concreto, el iPhone 6s tiene una de 29 mm y el Samsung Galaxy S6 de 28 mm. Esto, para quien no esté familiarizado con el concepto, indica los ángulos de visión vertical y horizontal de una cámara. A menor longitud focal, un ángulo de visión más amplio y, viceversa.
Es por ello que, realmente, la comparativa entre ambos terminales es más bien la que se representa en esta imagen, dando como resultado que el iPhone hace unas fotos algo más altas y el Galaxy S6 un poco más anchas.
Esto hace que, al fin y al cabo y con los megapíxeles que sea de diferencia, que en realidad importan poco porque también dependen del formato en el que se toma las imágenes, los detalles que se toman con una y otra cámara son muy parecidos pero con formato diferente.
Hay que acercarse un poco más a las imágenes para ver ya diferencias más notables y que dependen no de los megapíxeles sino de los algoritmos de mejora y procesamiento de imagen que aplica cada uno de sus sensores.
Podéis ver mas ejemplos en el reportaje de PhoneArena, quienes concluyen que como se puede ver, los megapíxeles ya no son tan importantes en una cámara – si es que alguna vez lo fueron -.