Seguro que si a Android (y a Google) podemos acusarle de algo es, precisamente, de la tremenda fragmentación que padece y que produce fenómenos tan extraños como que cuando se va a cumplir un año de la llegada de su última versión, la 5.0 Lollipop, su porcentaje de penetración en tablets y smartphones es realmente bajo. Y tan es así, que el OS de la piruleta no ha conseguido superar a KitKat.
Con Marshmallow en el horizonte
Google ha publicado a través de su web de desarrolladores unos interesantes gráficos que vienen a ser la constatación de que, por desgracia, Android 5.0 Lollipop no ha solucionado los graves problemas que sufre la plataforma cuando se trata de armonizar la mayor cantidad posible de dispositivos alrededor de una misma edición del OS.
Ahora mismo, con fecha 7 de septiembre (que es de cuando son los últimos datos recopilados), Android 5.0 Lollipop apenas suma un 21 por ciento del total de dispositivos Android que hay ahora mismo funcionando en todo el mundo, lo que es un porcentaje demasiado bajo como para considerarlo importante. Sobre todo si miramos justo encima y comprobamos que la versión 4.4 KitKat tiene ella sola casi un 40 por ciento. Es decir, el doble que el OS más moderno de los de Mountain View.
Hay que tener en cuenta que con Android 5.0 Google llevó a cabo una gran remodelación que trajo el celebrado material design y, al mismo tiempo, la sustitución de la máquina virtual Dalvik que venía utilizando Android desde el principio por otra más eficiente como es ART. Esto es crítico porque desde la compañía han fiado mucho de la evolución de la plataforma a esos cambios introducidos en Lollipop.
¿Y los Android Legacy?
Aunque entre Lollipop y KitKat suman el 61% del mercado actual de Android, un 39 por ciento vaga todavía por versiones anteriores como son Jelly Bean (con un 31,8% entre las versiones 4.1, 4.2 y 4.3), Ice Cream Sandwich con un 3,7, Gingerbread con un 4,1 y finalmente el ya lejano Froyo con un 0,2 por ciento.
Estos datos contrastan con los que suele manejar Apple, cuyos índices de penetración de iOS 8 no han evolucionado tan rápido como en versiones anteriores pero que, aún así, disfruta de cifras que rozan el 80 por ciento y que permiten a los de Cupertino aplicar una política mucho más racional a la evolución de su ecosistema. Aunque tengamos un dispositivo del año 2010 que sigue funcionando con la última versión del sistema operativo.