El próximo Motorola Moto G podría no ser tan genial, Lenovo echa a los desarrolladores
Las aguas bajan revueltas en Motorola, y parece que mucho. La compañía que ahora es propietaria del fabricante de dispositivos móviles ha decidido sacar la tijera anunciando que reduce un 20% de los puestos de trabajo de la primera y, demás, que esta tendrá una nueva identidad bajo el paraguas de Lenovo. De esta forma, terminales tan interesantes como el Motorola Moto G o el Moto X podrían verse afectados en futuras versiones y, quizá, no ser tan geniales como hasta ahora.
Esto se debe a una reacción ante unos malos resultados económicos que ha obtenido Motorola, que evidentemente no han gustado en la compañía China. De esta forma, se han decidido tomar medidas bastante radicales al respecto y parece que Lenovo quiere tomar las riendas de todo su negocio móvil para consolidarlo (sin perder la marca Motorola, claro). Según esta compañía, se busca una mayor agilidad y conseguir una cartera de producto mucho más clara e intuitiva de reconocer para los usuarios.
Pero, esto, hace que se dude de cómo serán en el futuro los terminales móviles de la “gran M”, en especial en lo que se refiere a su software. Este es uno de los más reconocidos en la actualidad en el Universo Android, tanto por utilizar un sistema operativo casi puro y, además, por el uso de desarrollos como Moto Voice o Moto Assist. El caso es que los responsables de estos trabajos se han visto directamente afectados por los recortes y serán remplazados por desarrolladores de Lenovo. Está por ver si estos tienen la misma visión que los de Motorola y siguen por el mismo camino, de ahí que indicáramos la posible pérdida de “genialidad”.
Un gran impacto
Lo cierto es que la información que se ha conocido habla de decisiones potentes e impactantes. Un ejemplo de lo que decimos es que Lenovo tiene planeado cerrar tres de las principales oficinas de Motorola, aunque la propia de Chicago se mantendría como sede de la segunda compañía y centro de desarrollo I+D.
El caso es que las decisiones de Lenovo parecen claras en lo que se refiere a integrar mucho más la estructura de Motorola (que seguirá contando como máximo responsable a Rick Osterloh) en su propio entramado móvil. De esta forma, lejos quedan las intenciones anunciadas de la compañía China en las que indicaban que no interferirían en los movimientos de la que habían comprado.
Barely a year ago, Lenovo said they wouldn’t interfere with Motorola. http://t.co/q9Rj822z2e
— Jean-Baptiste Queru (@jbqueru) agosto 14, 2015
Un golpe muy duro a Motorola
Lo cierto es que el golpe como decimos para Motorola es fuerte, y es posible que de esta compañía apenas quede la corteza exterior y, el interior, sea ahora de Lenovo. Por lo que aquellos que son fieles seguidores de modelos como Moto G o Moto X dudarán, con razón, si queda algo de la compañía para que se note su mano en futuros terminales. Pero, la verdad, es que cada vez Motorola tiene un tamaño e importancia menor.
Y ahora llega el turno de Lenovo, que con lo anunciado toma las riendas de todo y esperemos que sea capaz de dar continuidad al portfolio de producto del fabricante que adquirió (con opciones como MotoMaker). Lo cierto es que la compañía China ofrece unos productos -tablets y teléfonos- de muy buena calidad, pero que no llegan a todas las regiones y, por ello, la compra de Motorola tenía todo el sentido. Veremos cómo se suceden los acontecimientos, ¿vosotros qué opináis?