Ahora que la cuota de mercado de los relojes inteligentes empieza a aumentar, también salen a la luz los efectos que este crecimiento produce. No nos referimos al impacto económico en las cuentas de los fabricantes, no. Más bien nos centramos en las consecuencias de utilizar este tipo de dispositivos al volante. Y es que un estudio realizado en Reino Unido pone de manifiesto que los usuarios que utilizan smartwatches mientras conducen son más propensos a sufrir accidentes, mucho más incluso que los que recurren en alguna ocasión al smartphone.
El utilizar un smartphone mientras conduces ya está tipificado en el código de circulación como falta muy grave desde hace años. Concretamente en España se aprobaba la ley en enero de 2002. Sin embargo, en el caso de los relojes inteligentes, al ser un dispositivo de nueva creación aún no se contemplan sanciones. Al menos así lo indican en el rotativo británico Huffpost en la sección de tecnología. Sin embargo, un estudio realizado en tierras inglesas habla por sí solo de lo peligroso que puede llegar a ser la conducción mientras se utiliza uno de estos wearables. ¿Se tomarán pronto medidas al respecto?
Una “vida” de diferencia
De hecho, el estudio llevado a cabo por The Transport Research Laboratory (TRL) en Reino Unido pone de manifiesto un dato muy significativo. El tiempo de reacción de un usuario que utiliza un smartwatch al volante aumenta de forma alarmante respecto al que necesita si usa un smartphone. De forma más concreta, los laboratorios de la compañía que aborda el tema indican que mientras que se necesitan, de media, 1.85 segundos para reaccionar ante una emergencia cuando usamos un teléfono móvil, en el caso de tratarse de un smartwatch ese tiempo sube hasta los 2.52 segundos. En realidad hay menos de un segundo de diferencia, pero en el mundo de la automoción ese espacio de tiempo puede ser letal dependiendo de la velocidad del vehículo.
Requiere mayor atención por parte del usuario
A pesar de que los recientes modelos tienen asistente por voz, el uso de relojes de este tipo es una distracción muy peligrosa. Y es que habrá momentos que para su utilización, por su posición en la muñeca, implicaría movimientos concretos, amén de la necesidad de una mayor atención para “atinar” en una pantalla mucho más pequeña que la de un smartphone. Estos factores hacen del reloj inteligente un aparato mucho más peligroso que el teléfono móvil. Ante esta situación, diferentes organizaciones ya han alertado a las autoridades sobre la necesidad de tomar medidas.
¿Eres asiduo a este tipo de equipos electrónicos? ¿Utilizas tu smartwatch mientras conduces? ¿Eres consciente de la pérdida de atención que implica su utilización dentro del vehículo? Esperamos tus impresiones.