El segmento de phablets va en aumento y los últimos modelos presentados marcan una clara tendencia: pantallas enormes. Si bien el año pasado el modelo más destacado era el Samsung Galaxy Note 2 con display de 5.5 pulgadas, el número de opciones disponibles actualmente se ha disparado. Sin embargo, existen dos modelos por encima del resto que se posicionan como los más impactantes y son reciente presentación de los Sony Xperia Z Ultra y Samsung Galaxy Mega 6.3 que pasamos a comparar.
La fobia de las pantallas de grandes dimensiones parece haber pasado a un segundo plano. Ahora, a excepción del iPhone 5, la mayor parte de los smartphones de gama alta disponen de, al menos, un display de 4.7 pulgadas. En el caso de los phablet la medida de la pantalla se ha disparado, acercándose más a las siete pulgadas de las mini tabletas. Dentro de este grupo de modelos, los más destacados son los nuevos Sony Xperia Z Ultra y Samsung Galaxy Mega 6.3. Sin embargo, ¿qué diferencias existen entre ambos?
Diseño
Los dos equipos se caracterizan por heredar el diseño de los modelos de referencia dentro de la compañía. Por un lado el modelo nipón se basa en el concepto OmniBalance del Sony Xperia Z. En cuanto al equipo de Samsung, las líneas proceden del Samsung Galaxy S4. El resultado son dos equipos con un «carácter» totalmente diferente. El primero ofrece unas líneas angulosas y geométricas. El segundo luce una carcasa con líneas más suavizadas, redondeadas, que tal vez ofrezcan mayor ergonomía. En cuanto a los materiales, el Sony se posiciona mejor frente la modelo surcoreano con materiales más «premium» ya que el primero integra una carcasa con paneles metálicos y el segundo opta por el policarbonato. De hecho, la carcasa del Sony Xperia Z Ultra está certificado con el estándar IP58 que convierte el modelo en resistente al agua y al polvo.
Tamaño y peso
Las dimensiones de un phablet no son precisamente un factor determinante para decantarse por la compra por un modelo u otro ya que por definición estamos aceptando que es un equipo voluminoso. Sin embargo, sí existen aspectos como el grosor o el peso que pueden condicionarnos.
En el caso del Sony Xperia Z Ultra estamos ante el phablet más delgado del mercado. La firma nipona ha declarado unas cotas de 179.4 92.2 x 6.5 milímetros. El Samsung Galaxy Mega 6.3 registra unas medidas de 167.6 x 88 x 8 milímetros. Este último, aunque no tan fino, ofrece unas dimensiones más «humanas». Respecto al peso, el Sony Xperia Z Ultra supera la barrera psicológica de los 200 gramos. Exactamente pesa 212 gramos. El modelo surcoreano es algo más ligero, con 199 gramos.
Pantalla
El alma de los phablet. La pantalla se posiciona como el elemento más característico de este tipo de dispositivos. Aquel que se decanta por un phablet busca un display de «altas prestaciones». Sin duda, el Sony Xperia Z Ultra es el más destacado de la contienda en este aspecto pues dispone de un panel de 6.44 pulgadas y resolución FullHD, datos que determinan una densidad de puntos de 345 ppp. El Samsung Galaxy Mega 6.3 se acerca en tamaño con 6.3 pulgadas. No obstante, la resolución desciende hasta los 1.280 x 720 píxeles con una densidad de unos 240 ppp.
El Sony Xperia Z Ultra también se muestra superior en las características adicionales del display. El modelo nipón cuenta con varias tecnologías para mejorar y realzar la calidad de imagen tales como TRILUMINOS con el motor gráfico X-Reality. También dispone de OptiContrast para mejorar los ángulos de visión. En el caso del modelo de Samsung, el tipo de panel es Super Clear LCD, tal vez capaz de ofrecer unos ángulos de visión mejores, aunque no dispone de más ayudas que una capa protectora.
Cámara
Tanto el Sony Xperia Z Ultra como el Samsung Galaxy Mega 6.3 cuentan en su haber con una cámara de ocho megapíxeles acompañada de flash LED, autoenfoque y un apartado de funciones por software entre las que se incluyen el filtro HDR para fotos y vídeos.
En el caso del Sony Xperia Z Ultra encontramos un sensor Sony Exmor RS con retroiluminación para mejorar las capturas en ambientes poco luminosos. En el caso de Samsung, el fabricante no determina las características del sensor.
Conectividad
Lo más destacado en este apartado es la compatibilidad con redes LTE. Ambos modelos disponen de soporte para la tecnología LTE, aunque el modelo de Sony sale aventajado con una mayor velocidad de descarga, con 150 Mbps, frente a los 100 Mbps del Samsung. Lo mismo sucede bajo redes HSDPA. El primero soporta redes de hasta 42 Mbps frente a los 21 Mbps del segundo modelo.
El resto de especificaciones inalámbricas son prácticamente idénticas puesto que podemos encontrar NFC, WiFi N Dual Band, Bluetooth 4.0, GPS y la capacidad de compartir archivos mediante DLNA. No obstante, el equipo japonés dispone del protocolo ANT+, protocolo habitual en los terminales de Sony que permite emparejarlos con distintos accesorios. En cuanto a las conexiones físicas tampoco se presentan novedades destacadas puesto que ambos modelos disponen de las típicas salidas de audio y vídeo tales como jack de 3.5 pulgadas y conector microUSB para carga y salida de vídeo.
Procesador y memoria
El Sony Xperia Z Ultra parte con ventaja ya que su reciente presentación ha destapado por primera vez en un phablet el potente procesador Qualcomm Snapdragon 800 a 2.2 GHz que, además, incluye un chip gráfico Adreno 330. Por su parte, el Samsung Galaxy Mega 6.3 se conforma con un procesador Qualcomm Snapdragon 400 a 1.7 GHz y GPU Adreno 305. Junto a la pantalla, es el apartado en el que el modelo de Sony presenta la mayor ventaja. Referente a la memoria RAM, el primero dispone de 2 GB y el segundo de 1.5 GB. En cuanto al sistema de almacenamiento interno el Sony Xperia Z Ultra dispone de 16 GB y slot para tarjetas microSD. El Samsung Galaxy Mega 6.3 también cuenta con una versión de 16 GB de memoria interna, aunque la versión básica arranca en 8 GB. También permite ampliar la capacidad con tarjetas de memoria.
Autonomía
Uno de los puntos sensibles a la hora de elegir modelo es la duración de la batería. Sin embargo, en equipos de estas dimensiones suele ser un parámetro que mejora respecto al segmento de los smartphones. En el caso del Sony Xperia Z Ultra el equipo dispone de una batería con capacidad para 3.050 mAh. Dicha batería ofrece unos tiempos de uso, tal y como detalle el fabricante, de hasta 14 horas en conversaciones telefónicas, 120 horas en reproducción de música y 7.5 horas en vídeo. En cuanto a la autonomía en espera, con la tecnología STAMINA se eleva hasta las 790 horas. Por su parte, el Samsung Galaxy Mega 6.3 cuenta con una batería de mayor capacidad, 3.200 mAh, que según los datos proporcionados por Samsung ofrece 17 horas en conversación, 82 horas en reproducción de audio, 11 horas de vídeo y un tiempo de espera de 420 horas.
Conclusión
Las distintas partes de la comparativa ponen de manifiesto la superioridad técnicas del Sony Xperia Z Ultra. No en vano se encuentra un escalón por encima del Samsung Galaxy Mega 6.3. Mientras que el equipo de Samsung defiende una posición entre la gama media y la gama alta (su lucha directa está con el Huawei Ascend Mate), el Xperia Z Ultra se posiciona como el más destacado phablet del mercado. Aún así hemos de valorar en la balanza el precio de los dos modelos. Y es que el Sony Xperia Z Ultra adquirirá un precio recomendado de 720 euros, un dato que empieza a crear debate en torno a cuál debe ser el tope máximo en equipos de esta talla. En cuanto al Samsung Galaxy Mega 6.3, su precio de apenas 550 euros lo posiciona como un modelo más accesible de cara a disfrutar de la experiencia de usuario que es capaz de ofrecer una pantalla por encima de las seis pulgadas.