Desde su presentación, el Nexus 4 sorprendía tanto por sus características y precio, aunque especialmente por este último factor. Google fijaba un coste de 299 euros para la versión más económica, una cifra que no se corresponde con los precios de mercado de smartphones de alta gama. ¿Cómo es posible que dispositivos de semejantes especificaciones cuesten entre un 40 y un 50% más? ¿Dónde está el secreto para conseguir tal rebaja?
Hasta ahora, compañías dedicadas al negocio del software y del hardware habían mantenido bien diferenciadas sus actividades comerciales (a excepción de Apple, principalmente). Sin embargo, la evolución de los mercados –especialmente el de las tabletas, smartphones y «plataformas móviles»- ha derivado en una simbiosis entre ambos productos, momento que compañías como Amazon y Google tienen intención de aprovechar para su propio beneficio.
Google juega con ventaja
Desde la irrupción del Nexus 4 en el mercado de smartphones de alta gama se han generado infinidad de debates acerca de cómo es capaz de ofrecer Google un precio tan bajo respecto a la competencia. ¿Demasiado afán recaudador por parte de los fabricantes? Es una teoría que se ha planteado, pero el enfoque de este asunto es bien diferente puesto que el buscador juega con ventaja y ésta se llama Android. Mientras que fabricantes como Samsung, HTC, Sony y Motorola, entre otros, basan únicamente su modelo de negocio en el margen de beneficio de la venta del hardware, el gigante de Internet tiene el respaldo ya no solo de su habitual negocio del buscador (vía móvil) sino que ahora también cuenta con su tienda Google Play en la que ofrece aplicaciones, libros, música y películas.
La importancia de Google Play
¿Qué tiene que ver la venta de contenidos con el precio del hardware? Ambos están íntimamente unidos y Google ha sabido sacarle partido a la gran popularidad que ha adquirido Android a nivel mundial. Cuanto mayor sea el número de usuarios que cuentan con un dispositivo Android, más volumen de negocio generará con la venta de contenidos, ya sean aplicaciones, juegos o archivos multimedia. En un primer momento intentó proporcionar relevancia a su plataforma de software mediante el lanzamiento de sucesivos terminales de marca propia, pero fabricados por encargo. Éstos marcarían el camino al resto de fabricantes, al menos en lo que respecta al primer Nexus, el Nexus One. Posteriormente aparecieron otros dos más (Nexus S y Galaxy Nexus), que salían a la venta con el atractivo de contar con el soporte técnico del propio buscador (son los primeros modelos en actualizarse con las novedades de Android mientras el resto tienen que esperar, de media, al menos seis meses). Sin embargo, el Nexus 4 es diferente puesto que a las ventajas de ser un teléfono Google, los de Mountain View han querido fijar un precio insuperable para el resto. Esta estrategia permitirá expandir Android aún más, pero ¿cómo es posible fijar un precio de 300 euros cuando los respectivos de la competencia cuestan casi el doble?
Nexus 4 y Google Play, el equilibrio perfecto
Al igual que hizo en un primer momento Amazon con su Kindle Fire, Google apuesta por extraer beneficio de la venta de contenidos a través de Google Play y conseguir información de sus usuarios para optimizar la temática de la publicidad, al igual que sucede al utilizar sus servicios desde un PC. Por tanto, Google estaría, al menos, vendiendo el Nexus 4 a precio de coste, de modo que no ganaría dinero con su venta, pero sí con la actividad de los usuarios y cuanta más actividad, más dinero. Incluso se habla de que los norteamericanos podrían estar “subvencionando” los smartphones, de forma que pagaría a LG, su socio, una suma por cada terminal vendido.
Esta estrategia podría ser limitada en el tiempo, a modo de promoción, pero Google ha dado muestras de que el Nexus 4 seguirá vendiéndose al mismo precio desde Google Play. Este hecho es más trascendental de lo que parece pues la repercusión en el mercado será notoria. ¿Y si Google decidiese seguir con esta estrategia comercial en un futuro? ¿Qué poder de reacción tendría la competencia? Realmente escasa. Ni tan siquiera los operadores pueden hacer frente al Nexus 4. Éstos sí rebajan el precio del terminal, pero a cambio de un gasto mensual en concepto de tarifas telefónicas y permanencia. Google permite adquirir su teléfono a un precio similar ofreciendo al usuario la elección de la operadora deseada, con mejores condiciones y sin permanencia en el caso de escogen un OMV puesto que solo se aprovecha del uso de su sistema operativo Android y su ecosistema de aplicaciones y servicios. El negocio de la telefonía está cambiando y la muestra está en que Apple, Google y próximamente Microsoft tienen su propio teléfono, avalado por el peso de su software, con las ventajas que ello conlleva. Saben que tienen la sartén por el mango u quieren sacar partido.