A partir de mañana 1 de junio, entra en vigencia la normativa europea y el acuerdo al que han llegado todas las operadoras para hacer las portabilidades en 24 horas. Sin embargo, parece que esta «portabilidad express» esconde letra pequeña, ya que en la práctica el tiempo será de 48 horas reales e incluso más. Os contamos los detalles a continuación.
A partir de mañana viernes 1 de junio, en teoría es posible hacer una portabilidad en tan sólo 24 horas, pero este eslogan tan marketiniano no es del todo cierto, ya que en realidad tomará, cómo mínimo, 48 horas naturales, y si la solicitáis a partir de un jueves, no estará hecha hasta después del fin de semana.
Esto es el proceso “estándar” en las supuestas 24 horas
Como indican en el blog de las Tiendas Yoigo de Smol, las portabilidades en 24 horas «nacen con la misión de agilizar el proceso de portabilidad entre compañías para reducir al máximo las molestias para el usuario.»
Cuando un usuario desee portar su número de un operador a otro, bastará con que él mismo se ponga en contacto con la nueva operadora, por los medios que tenga disponible (tiendas, teléfono o Internet) y exprese su deseo de portar su número a su red. En ese momento, la operadora que acoge el nuevo cliente tiene entre 4 y 5 horas máximo para aceptar o rechazar la solicitud. Esto es lo que se conoce como el «scoring», método que aplican las operadoras para conocer la solvencia económica del cliente y aceptarle o no.
En la inmensa mayoría de los casos sale positiva, por lo que la pelota pasa al tejado del operador donante, que una vez recibida y aceptada la portabilidad, dispone de hasta las 14.00 h del día anterior a la portabilidad para ponerse en contacto con su cliente e intentar convencerle de que no se marche. Esto hace que el cliente no podrá cancelar pasadas las 14.00 h del día anterior a la portabilidad y se reduce así el juego del «¿tú que me das?» al que todos hemos jugado alguna vez con nuestro operador.
Esta hora límite tiene su razón de ser en una limitación técnica del sistema, que también marcará, como comentaremos a continuación, que la portabilidad no sea en 24 horas reales, sino en al menos, 48 horas. Hay que tener en cuenta que con esta nueva normativa no desaparecen las penalizaciones por permanencias sin cumplir y antes de iniciar cualquier portabilidad es responsabilidad del usuario asegurarse de que no se cuenta aún con permanencia con el operador desde el que se quiere marchar. Suponemos que éste actuará en consecuencia penalizando este movimiento en la última factura.
Por qué no es real la portabilidad en 24 horas
Entramos en la clave del asunto porque a la vista de esto las cuentas no salen en un día de «portabilidad express». La limitación técnica que se menciona tiene que ver con el horario de funcionamiento del Nodo Central de la CMT que utilizan las operadoras para estos procesos. Está activo de lunes a viernes de 8:00 a 20:00 horas, o lo que es lo mismo, 12 horas al día. Además, tampoco es posible realizar portabilidades en sábados, domingos o festivos porque tampoco funciona.
Y aquí es donde se esconde el secreto de por qué las 24 horas de las que se habla no son “naturales”, y en la práctica, tomará como mínimo dos días si la portabilidad se solicita de lunes a miércoles, y hasta 4 días si se hace a partir del jueves. Intentemos aclararlo con algunos ejemplos.
Si alguien solicita la portabilidad entre el lunes y el miércoles, tiene hasta las 14:00 del día siguiente para retractarse y el proceso estará completo al día siguiente. Es decir, tendrá teléfono, SIM y línea portada (entre las 2:00 am y 6:00 am) del tercer día natural. Sin embargo, si lo hace un jueves, tiene hasta el viernes antes de las 14:00 para retractarse, pero no recibirá el terminal, la SIM y se portará la línea hasta el lunes.
Al menos, las tiendas ya no pueden demorar más de ese tiempo la entrega de los terminales, ya que los deben tener dispuestos el mismo día que se hace la portabilidad.