De entre las prestaciones que sí se esperan que integre el iPhone 5, destaca una pantalla algo más grande, una cámara mejorada y un procesador de mayor capacidad. Es decir, tres elementos que suelen ser la clave de todos los smartphones lanzados por Apple. Sin embargo, son muchas las páginas especializadas en tecnología que opinan, que salvo la pantalla (de 4 pulgadas o similar), no deberíamos esperar grandes cambios con respecto a su predecesor.
Según la página de noticias International Business Times, la siguiente generación iPhone, la número 5, no será el terminal inteligente más potente y rápido del mundo. Esto lo alegan porque el nuevo iPad y su procesador A5X, según varias evaluaciones realizadas por diferentes páginas, no es más rápido que el iPad 2. Así que en IBTimes creen que el nuevo iPhone tampoco será mucho más rápido que su predecesor.
Otro elemento clave del que tampoco creen que veamos grandes mejoras es la batería. Y recurren al mismo ejemplo de los iPad. La nueva tableta tiene más batería pero mantiene las 10 horas de vida que tenía el iPad 2. El iPhone 4S se supone que dispone de 200 horas en espera (recordemos que el iPhone 4 disponía de 300), 8 horas de tiempo de conversación en modo 3G, 14 horas en modo 2G, 6 horas de navegación 3G y 9 horas si usamos el Wi-Fi. Muchos usuarios se quejaron de que la batería no alcanzaba las horas anunciadas en las especificaciones y por eso las actualizaciones de iOS han ido encaminadas, entre otras cosas, a solucionar problemas de autonomía. Ahora bien, dado que se espera que el nuevo iPhone sea 4G, que lleve un procesador de cuatro núcleos y que la pantalla de alta resolución sea más grande, es poco probable que tenga unos tiempos de autonomía mayores que el iPhone 4S.
Tampoco debemos esperar…
Soporte 3D. Aunque hay fabricantes que ya están trabajando en esta línea, el ejemplo de Samsung o LG, lo cierto es que las tres dimensiones están dando sus primeros pasos en los dispositivos portátiles, tanto a nivel de pantallas como de aplicaciones. También es cierto que Apple está investigando en este terreno, concretamente en una cámara capaz de capturar imágenes fijas y en movimiento en 3D mediante un método, patentado, para crear imágenes tridimensionales usando múltiples sensores. Pero es poco probable que lo veamos implementado en la próxima generación iPhone.
En cuanto al tamaño de la pantalla del iPhone 5, las noticias son de lo más variado. Se da por hecho que será algo más grande, rondando las 4 pulgadas, pero es que hemos leído noticias que le atribuyen hasta 4,6 pulgadas. Si miramos la evolución de los iPhone, realmente en este aspecto no se han producido variaciones, 3,5 pulgadas es su tamaño estándar, ya que Steve Jobs se oponía a las 4 pulgadas para el iPhone. Ahora bien, el mercado parece estar demandando productos con mayor tamaño, forzando a Apple a subirse a este tren por eso parece que las 4 pulgadas serían más que suficientes para el iPhone 5 con una resolución de 1.080 por 720 píxeles con una densidad de 324 ppp para alcanzar los requerimientos de la pantalla Retina.
Otro elemento de discordia que tampoco es probable que veamos en el iPhone 5 es soporte para tarjetas SD. La filosofía de Apple en sus dispositivos móviles es que toda memoria esté dentro del equipo (16, 32 o 64 GB) cuando lo compramos, así ha sido hasta ahora y no es probable que la compañía cambie su manera de pensar. De hecho, el nuevo iPad ni lleva soporte para tarjetas SD ni puerto USB.