El área de investigación de Nokia es muy extensa y entre la variedad de proyectos llevados a cabo se encuentra Nokia Solar. El estudio se centra en Lokki, un Nokia C1 modificado al que se le ha acoplado un grupo de paneles solares y un sistema por software que monitoriza la carga de la batería. Éste es el resultado.
Los combustibles fósiles han sido y son la fuente de energía más utilizada para satisfacer la demanda energética mundial. Sin embargo, el progresivo encarecimiento de estos recursos naturales y principalmente la supuesta escasez del llamado oro negro han derivado en un considerable aumento de la investigación en busca de alternativas viables. Dentro de estas se encuentras las energías renovables, donde toma especial importancia, además de la eólica, la energía solar. Las ingentes cantidades de dinero destinado por la comunidad internacional a la investigación y optimización de la transformación de la energía solar en eléctrica han conseguido abaratar en gran medida el procedimiento y los medios necesarios para la reconversión de la energía de los fotones en una corriente eléctrica aprovechable. Se estima que el coste por KW se ha reducido hasta los 0.22 dólares, acercándose a los 0.11 de los combustibles fósiles. Es por eso que el aprovechamiento de la energía del sol en nuestros móviles empieza a cobrar sentido.
Nace Lokki
En 1883, Charles Fritt inventó el primer panel solar que tenía un rendimiento cercano al 1%. Actualmente, los paneles de Arseniuro de Galio, los utilizados por la NASA, consiguen un aprovechamiento cercano al 45%. No obstante, el elemento que ostenta la mejor relación entre coste-rendimiento se lo lleva el Silicio, con un rendimiento del 22 al 24% en condiciones ideales. Así pues surge Nokia Solar, un proyecto de la finlandesa en cooperación con un grupo de investigadores, con Heikki Paananen a la cabeza. Esta alianza surgió con la elección de un teléfono que se adecuara a las exigencias del estudio. Por gasto energético y la relativa facilidad para adaptar a sus “lomos” los paneles solares necesarios, el Nokia C1 se convirtió en el principal protagonista de esta historia. En la parte trasera se adaptó un sistema de mini paneles solares que abastecerían de energía a la batería de poco más de 1000mAh, que a su vez se le adaptó un circuito para conseguir un sistema híbrido que permitiese tanto la carga convencional como la solar. Igualmente se adaptó un software que monitoreara toda la información necesaria para sacar conclusiones. Surge así Lokki, el teléfono de Nokia C1 adaptado con paneles solares.
Las pruebas
Unos meses más tarde, el grupo de Heikki aporta las primeras conclusiones después de algunas pruebas llevadas a cabo en diferentes partes del mundo. Los destinos fueron seleccionados cuidadosamente atendiendo a la incidencia de los rayos solares, los tiempos de luz solar y la temperatura, un factor que se opone a la eficiencia energética de la energía solar.
La aventura comienza en Laponia, una región donde el verano se caracteriza por estar dominado las 24 horas por la luz solar, aunque con grandes variaciones de temperatura. En este ambiente, el Lokki ha tenido diferentes resultados, dependiendo en gran medida de la incidencia de los rayos solares y las nubosidades. Los registros marcan cargas máximas de hasta 140mAh, suficientes para realizar una llamada de hasta 82 minutos o 69 horas en espera. No obstante, los bajones de rendimiento por las nubosidades empeoraron los resultados en días sucesivos. Mejor fue la experiencia en la zona del mar Báltico, donde un miembro del grupo llevó a cabo el análisis en un viaje en barco.
Sin embargo, fue en Kenia, Nairobi, donde el comportamiento de este Nokia C1 adaptado (Lokki) aportó los mejores registros. Sin duda, un gran estímulo para que la tecnología abrace con más ímpetu la energía solar, sobre todo en este tipo de zonas donde, por ejemplo, cerca del 85% de la población de Kenia no dispone de acceso a la electricidad.