La guerra en la fabricación de smartphones se presenta muy dura en la próxima década, y aunque actualmente hay dos actores que destacan por encima del resto, Apple y Samsung, hay un tercer invitado, Sony, que quiere sumarse al podium y aspira a ser tercer fabricante del mundo de teléfonos inteligentes lo antes posible, tal y como asegura Dennis van Schie, jefe de Ventas y Marketing de la compañía.
Las cuentas y los competidores los tiene muy claros Sony. Hay que dejar atrás cuanto antes a HTC, y no permitir que se pongan al nivel Huawei o ZTE. Posteriormente, y sobre esas premisas, Dennis van Schie habla de que actualmente tienen entre un 6-7% del mercado en términos de valor, y el objetivo marcado para Sony es llegar lo antes posible a una cuota de mercado del 20%.
Para conseguir ese ascenso bastante importante en cuanto al negocio que tiene pensado abarcar Sony, el jefe de Ventas y Marketing pone encima de la mesa dos cuestiones que tienen mucho peso en la compañía y sobre las que seguramente girará su estrategia: el valor de la marca y su red de distribución. Sobre la segunda cuestión cita un ejemplo personal de cuando él fue responsable de esa área en India, y deja muy claro que para la distribución, si que quiere llegar a los lugares más recónditos, es muy importante que el número de trabajadores sea lo más elevado posible.
Diferenciando el futuro
En esa carrera marcada por Sony para llegar a ser el tercer fabricante a nivel mundial de smartphones, van Schie aborda como elemento clave la separación de Ericcson, empresa a la que Sony ha estado unida más de 10 años, y que, según el jefe de Ventas, en ocasiones fue un lastre tecnológico más que otra cosa.
En esa búsqueda de identidad, Sony pretende trabajar con una gama de productos “Premium” que pueda competir en calidad con cualquier compañía. Asimismo, una de las actuales preocupaciones de Sony se encuentra en los mercados chino y estadounidense, donde en estos momentos tiene una cuota de mercado bastante pequeña, y su desarrollo no lo tienen del todo claro.