Aunque hace apenas unas semanas, poco después de sus primeros días en el mercado, desde [sitename] os informábamos de la posibilidad de desbloquear el gestor de arranque o bootloader del HTC One X, ahora resulta que no todas las versiones admiten este procedimiento. Existe una explicación.
El año pasado HTC decidía poner punto final a las limitaciones impuestas de serie en sus smartphones Android para que los desarrolladores no pudiesen introducir cambios en sus terminales. Nos referimos principalmente a facilitar la sustitución de llamado recovery para posteriormente permitir la instalación de ROM personalizadas.
La nueva política de HTC, aunque más restrictiva que en sus primeros años como compañía pionera en la fabricación de smartphones Android, permite a los usuarios que lo deseen desbloquear sus terminales (siempre y cuando la firma incluya el soporte oficial en su página para desarrolladores) para modificar los parámetros deseados del sistema operativo. Sin embargo, esta decisión parece no estar solamente supeditada al consentimiento del propio fabricante, sino que los operadores también tienen mucho que decir al respecto. Y para muestra un botón o lo que es lo mismo, la actitud de AT&T, uno de los principales operadores en EEUU.
Desde su lanzamiento comercial a nivel internacional hemos podido comprobar que el HTC One X permitía a los usuarios aplicar modificaciones a nivel de desarrollador, previa preparación del sistema con un software específico. Sin embargo, desde que AT&T pusiese en marcha la distribución del modelo americano, ese que integra el procesador Qualcomm Snapdragon S4 en lugar del NVIDIA Tegra 3, muchos usuarios se han visto frustrados ante la incapacidad de las herramientas oficiales de la taiwanesa HTC para desbloquear su HTC One X. La reacción de los afectados no se ha hecho esperar, hecho que tampoco ha pasado inadvertido para HTC, que ya ha ofrecido un comunicado oficial al respecto. De una forma políticamente correcta, la empresa asiática ha querido dejar patente que desde que hace seis meses optaran por desbloquear sus teléfonos Android, ya son más de 45 los modelos compatibles con la herramienta facilitada para tal propósito. Sin embargo, la nota negativa la ha puesto la lectura entre líneas de la nota de prensa. Y es que han los taiwaneses querido dar a entender que entre las condiciones para liberar el bootloader se encuentran que el operador esté de acuerdo con esta técnica. Por tanto, en este caso sería AT&T el que ha impedido que los usuarios tengan el control absoluto sobre el HTC One X.
¿Por qué se da esta situación? Sencillamente porque los operadores en su mayoría personalizan el firmware de los teléfonos que ofrecen para introducir software adicional, principalmente para facilitar el consumo de servicios adicionales proporcionados por los propios operadores. Por tanto, el ofrecer al usuario la posibilidad de eliminar este software (que es lo que ocurre normalmente con la instalación de ROM personalizadas) no es una opción para estas empresas, con el consiguiente perjuicio para los usuarios. Por el momento éste es el único caso que conocemos, aunque esperamos que las versiones comercializadas en otros países, como puede ser España, no vengan limitadas por la imposición de las operadoras.