El Google Pixel y Google Pixel XL son los dos últimos smartphones presentados por Google con los que la compañía pretende mantenerse en el mercado de los dispositivos de gama alta. A diferencia de lo que ocurrió con los primeros Nexus, esta nueva marca no está enfocada especialmente al desarrollo de aplicaciones, sino que busca abrirse un hueco en el sector doméstico, como hemos dicho, de gama alta. Por ello, aunque la compañía no limita ciertas opciones, algunas sí que las ha complicado, como el proceso para hacer root al Google Pixel y Google Pixel XL.
Android ha cambiado mucho en sus últimas versiones, y muchas de las aplicaciones que antes necesitaban permisos de root para funcionar ahora son capaces de hacerlo sin problemas tan solo con los permisos administrativos del sistema operativo. De todas formas, los usuarios más avanzados prefieren seguir teniendo el control absoluto sobre sus sistemas y, por ello, los principales desarrolladores, como Chainfire, siguen trabajando en llevar esta configuración a todos los dispositivos posibles.
Lo primero que debemos hacer es asegurarnos de haber liberado el bootloader de nuestro dispositivo. A continuación, os dejamos un manual, paso a paso, sobre cómo hacer esto.
Una vez abierto el bootloader, ya podemos empezar el proceso para hacer root al Google Pixel y Google Pixel XL
Una vez que tenemos el bootloader de nuestro dispositivo abierto, lo apagamos por completo para volver a iniciarlo en el «modo bootloader«. Para ello, lo encendemos pulsando la tecla «bajar volumen» junto a la de «power» y, una vez veamos al Android con la tapa abierta, conectaremos el cable USB al ordenador y esperaremos a que este lo detecte.
A continuación, debemos descargar los archivos necesarios para realizar este proceso. Por desgracia, los archivos para hacer root al Google Pixel y Google Pixel XL no son retrocompatibles, por lo que tendremos que descargar el archivo correspondiente a nuestro dispositivo.
Una vez descargado el archivo, lo descomprimimos y movemos el fichero «boot-to-root.img» a la carpeta de nuestro ordenador desde donde ejecutamos ADB (por comodidad).
Ahora, abriremos de nuevo una ventana CMD en la ruta de ADB (igual que en proceso para desbloquear el bootloader) y ejecutaremos el comando «fastboot devices» para comprobar que, efectivamente, el ordenador detecta el dispositivo.
Si nuestro ordenador detecta correctamente el dispositivo, lo único que nos queda por hacer es ejecutar el siguiente comando:
- fastboot boot boot-to-root.img
Esperaremos unos segundos que la imagen se envíe correctamente al dispositivo y se apliquen los cambios y, tras ello, veremos que en la ventana de CMD de nuestro ordenador nos marca «OKAY«.
Todo ha salido correctamente. Ya podemos desconectar nuestro smartphone del ordenador y esperar a que encienda. Este proceso puede tardar bastante tiempo, y es posible que se reinicie incluso dos veces antes de hacerlo, por lo que debemos esperar con paciencia y sin preocuparnos.
Debemos tener en cuenta que, si instalamos alguna actualización de Android, es muy probable que tengamos que volver a hacer root al Google Pixel y Google Pixel XL, incluso es posible que estos permisos dejen de funcionar, por lo que, si hacemos root, mejor evitar actualizar el sistema operativo.
Comprobar el root y solucionar errores con el root
Si queremos comprobar que el proceso se ha realizado correctamente pero aún no tenemos ninguna aplicación que requiera de estos permisos, podemos comprobar los permisos de root fácilmente utilizando la siguiente aplicación.
Cuando ejecutemos la aplicación, nos aparecerá una ventana de «Superuser» donde nos pedirá confirmar dichos permisos, así que, lo hacemos, y veremos cómo nos aparece un mensaje que nos indica «Congratulations! Root access is properly installed on this device!«. Todo ha salido bien y nuestro Google Pixel y Google Pixel XL ya tienen permisos de root, aunque, antes de terminar, es recomendable realizar un paso más.
Cuando hacemos root al dispositivo, debido a un fallo, es muy probable que, al llegar al 15% de carga, nos aparezca un fallo que nos indica que «Desafortunadamente, System UI se ha detenido«. Esto puede solucionarse fácilmente cargando el dispositivo siempre por encima del 15% (algo que, además, es bueno para la batería), sin embargo, si queremos evitar este error, lo único que debemos hacer es acceder a las propiedades de la batería e indicar que queremos que el ahorro de energía se active automáticamente al 15%.
A partir de ahora, podremos utilizar root sin problemas y sin ver ningún tipo de error, aunque el porcentaje de la batería baje del 15%.