En los tiempos que corren hacerse con un móvil de gama de entrada ya no es sinónimo de mala calidad, sino de todo lo contrario. Independientemente del dinero que gastemos, comprando móviles de determinados fabricantes, como Realme, sabemos que nos hacemos con dispositivos de calidad. Y más ahora que junto a TÜV Rheinland han creado un nuevo estándar de calidad.
Hablar de TÜV Rheinland es sinónimo de calidad y de altos estándares en la fabricación de cualquier producto que se comercializa en el mercado. Ahora esta garantía también la vamos a obtener en nuestros teléfonos móviles gracias a la colaboración de ambas compañías.
Más garantías de calidad para nuestros móviles
Realme ha anunciado su colaboración con TÜV Rheinland para obtener una nueva certificación de calidad específica para smarpthones, y que por supuesto van a estrenar sus móviles. El objetivo de esta asociación es la de crear nuevos estándares de calidad para teléfonos móviles. El fruto de esa colaboración tiene un nombre «Certificación TÜV Rheinland de Alta Fiabilidad para smartphones» que como es evidente va a garantizar la calidad de los productos que se lancen bajo esta distinción en base a unos parámetros muy estrictos.
De esta manera el fabricante de móviles chino se convierte en el primero del mercado en contar con esta certificación en uno de sus móviles, ya que será el modelo Realme C21 el que la estrene. De esta manera los clientes de la marca podrán saber de antemano que estos teléfonos, ahora este modelo en concreto, han pasado unos estrictos controles de calidad para poder llegar al mercado y ofrecer toda la fiabilidad de uso necesaria en los tres primeros años de vida del terminal.
¿Cómo se obtiene este sello de calidad?
Este nuevo sello de calidad aglutina un total de 23 pruebas diferentes realizadas sobre el teléfono. En estas pruebas se han contemplado diferentes situaciones que se dan en el uso cotidiano y diario del teléfono. Como por ejemplo las caídas, el desgaste, o las roturas. También hay pruebas basadas en entornos de uso más hostiles, como por ejemplo con temperaturas extremadamente altas, con mucha humedad, o alteraciones en el voltaje. Y por último se superan seis pruebas basadas en componentes internos del teléfono.
Para alcanzar estos estándares Realme está mejorando además sus procesos de producción. De hecho la empresa ha anunciado que están invirtiendo en el desarrollo de una fábrica de smartphones inteligente, que funcionará de manera completamente automatizada cuando esté lista. Así se podrá mejorar el proceso de fabricación de los teléfonos alcanzando estos estrictos estándares de calidad de una manera más precisa. La línea de producción SMT de Tecnología de Montaje Superficial es una de las encargadas de montar los componentes de la placa base, y ya cuenta con una automatización del 87,5%, lo que está bastante por encima de los estándares actuales de la industria.
Esto nos puede dar una idea de hasta qué punto los estándares de calidad marcados junto a TÜV Rheinland pueden ser alcanzados con facilidad en los próximos años. Esta fábrica inteligente de Realme podrá fabricar hasta 60 millones de dispositivos al año. De esta forma Realme ya no solo se muestra como un fabricante de móviles con una excelente relación de prestaciones y precio, sino que además puede presumir de unos estándares de calidad únicos en el mercado.