Cuando la GSMA y la ciudad de Barcelona anunciaron el pasado mes de febrero, con todo su pesar, la cancelación de la feria más importante del sector de la telefonía móvil mas importante del año, prometieron que el MWC2021 de este año regresaría con más fuerza que nunca, convirtiéndose en el mejor evento de la historia.
Lamentablemente, inmersos en una tercera ola que ya parece superar a la primera del Covid19 en nuestro país, parece que aquellas esperanzas se han quedado en meros deseos.
La Generalitat apuesta por celebrar el MWC
El MWC influye de gran manera en la economía de Barcelona y perder solo una feria puede resultar en una brecha en los ingresos de la ciudad más que evidente. Por ello, la Generalitat no parece estar dispuesta a que pase un nuevo año sin su evento de referencia. Según destaca EFE, Ramon Tremosa, consejero de Empresa y Conocimiento de la Generalitat, asegura que el Mobile World Congress se celebrará «sí o sí» este año en la ciudad condal. ¿Cómo? Esa es la gran pregunta.
El político afirma que el evento se llevará a cabo en las próximas semanas redoblando, en incluso triplicando, las pruebas sanitarias a todos los asistentes, aunque estos sean mucho menores que los recibidos en años anteriores. El deseo del mandatario es que todos los participantes, ya sean empresas, expositores, anunciantes profesionales y visitantes estén libres de Covid19.
Eso sí, no será ahora. La idea es celebrar el evento, siempre y cuando la evolución de la pandemia sea favorable y no nos encontremos con contratiempos, durante la última semana de junio.
¿Va a ser posible?
Cuando se anuló el MWC de 2020 todos pensábamos que la situación sanitaria mejoraría rápidamente pero la realidad nos ha vuelto a poner en nuestro sitio y, a día de hoy, la tasa de infección está al nivel de marzo de 2020, con Cataluña como uno de los epicentros de la enfermedad.
Hay que tener en cuenta que no solo la situación pandemia en la comunidad y en el país, sino las restricciones a los viajes y la ausencia de grandes móviles a presentar en la citada fecha, también puede reducir enormemente las posibilidades de celebración del evento, por muchas ganas que el consejero le ponga.
Sabiendo que el MWC atrae a más de 100.000 asistentes entre visitantes, delegados, periodistas y expositores; que proporciona puestos de trabajo temporales a más de 15.000 miembros del personal de servicio, y que grandes equipos de construcción construyen instalaciones para el registro y la admisión, pabellones temporales adicionales y preparan los stands y las salas de conferencias, es normal que desde Barcelona no se quiera renunciar al evento pero la situación actual no es demasiado optimista.