¿Puedes confiar en la garantía de tu móvil resistente al agua? No todo lo que te gustaría
Los móviles con residencia al agua cada vez son más comunes y nos encontramos con la certificación IP más relacionada con la tecnología. Para tranquilidad de los usuarios, ahora podemos disfrutar de ellos sin tanto temor a que nos caiga agua en algún momento, sobre todo en las épocas de calor con los móviles que nos acompañan a la playa o la piscina.
Por muy tranquilos que nos sintamos, si finalmente la protección no funciona como debería, tendremos que ponernos en contacto con el fabricante, quien siguiendo unos estrictos pasos nos informará si realmente el fallo es del dispositivo y entra en garantía o por el contrario es culpa de un mal uso.
Protección IP ante el agua dulce y agua salada
Piénsalo antes de lanzarte con el móvil a la piscina, porque tenemos que conocer al detalle todo lo que supone esto, dado que nuestro teléfono móvil no está protegido ante todos los líquidos. De manera individual vamos a tener que consultar en la garantía de cada fabricante, aunque te adelantamos que en ninguno de ellos vamos a poder sumergir el móvil en agua salada, por lo que podemos olvidarnos por completo de llevarlo a la playa, además de que es un lugar con altas temperaturas y podemos provocar daños derivados. Aunque, nosotros te lo ponemos más fácil y te decimos qué daños cubre la garantía del móvil.
Ante los líquidos, no es lo mismo mojar nuestro móvil con agua de una botella de agua potable, que hacerlo en un rio con tierra, piedras y suciedad, un aspecto que los fabricantes dejan claro en sus instrucciones incluidas en la caja. Huawei o LG por ejemplo nos informa de que un mal uso de las posibilidades del smartphone, hará que no entre en garantía y esto puede darse si se encuentra tierra, arena o golpes en el smartphone. La mayoría de marcas solo protegen sus terminales ante agua dulce y en caso de encontrar otros líquidos, será rechaza la reparación.
También debemos ser conscientes de que la garantía no dura siempre y por ley está limitada a un mínimo de 2 años en la mayoría de los casos, aunque en el caso de la residencia al agua, puede estar reducida hasta 1 año, porque las capacidades de resistencia se van perdiendo con el uso. En todo caso el terminal no puede llevar fuertes golpes o marcas de haber sido abierto, de lo contrario la garantía quedará eliminada por completo.
Otros líquidos diferentes al agua
En el caso de las piscinas con cloro, ya estamos añadiendo un compone extra al agua y en la revisión del terminal se encontrarán partículas de cloro que echaran hacia atrás nuestra garantía. Otro de los casos más comunes puede ser la Coca Cola o bebidas con gas, las cuales resultan más corrosivas que el agua y tampoco forman parte de la garantía de nuestro teléfono móvil.
Existen muchos líquidos frente a los que nuestro smartphone no puede hacer frente, aunque el móvil sea resistente al agua. No debemos olvidar que se trata de un dispositivo tecnológico y estos componentes no se llevan muy bien con los líquidos. La protección que consigue evitar que el agua entre en el smartphone solo está preparada para el agua y el resto de productos pueden hacer que deje de funcionar sin cubrirlo la garantía.
Conoce los limites de tu móvil
Aunque podamos leer en la caja que nuestro teléfono móvil es resistente al agua, esto no quiere decir que lo hará como un buceador profesional. La presión puede afectar a varios componentes y terminar por hacer que el agua se cuele en su interior, dejándonos sin smartphone y quedando exenta a la garantía. Dependiendo de nuestro móvil, vamos a contar con una certificación IP, donde el segundo número que aparece después de las letras IP corresponden a su residencia al agua.
Además de esto, cada fabricante nos indicará en sus instrucciones la profundidad máxima, así como su tiempo máximo para estar sumergido y si superamos esos limites, tendremos que hacernos carga de la reparación. Con todos estos datos, debemos tener claro que la resistencia al agua de nuestro teléfono no nos libra de cualquier problema relacionado con líquidos y mucho menos si este ha sufrido golpes o un mal uso.
Grados de protección IP más comunes
El primer número del grado de protección indica la resistencia ante el polvo que tiene nuestro smartphone, evitando que entren partículas que puedan dañarlo. Los niveles van desde el 0 hasta un máximo de 6 en los productos tecnológicos y móviles que podemos comprar.
- Grado 0: Sin protección.
- Grado 1: Inmune a la entrada de elementos sólidos de hasta 50mm.
- Grado 2: Inmune a la entrada de elementos sólidos de hasta 12,5mm.
- Grado 3: Inmune a la entrada de elementos sólidos de hasta 2,5mm.
- Grado 4: Inmune a la entrada de elementos sólidos de hasta 1mm.
- Grado 5: Inmune a la entrada de polvo sin afectar a los componentes internos.
- Grado 6: Totalmente protegido contra la entrada de polvo.
Mientras tanto el segundo digito es el que más nos interesa, puesto que es el que nos evita sufrir problemas ante los líquidos que son más complicados de solucionar. Esta resistencia es más avanzada y nos permite hasta 9 niveles de protección.
- Grado 0: Sin protección frente al agua.
- Grado 1: Resistente a la entrada de agua por goteo o salpicaduras.
- Grado 2: Resistente a salpicaduras de agua desde cualquier dirección.
- Grado 3: Resiste agua en spray durante 5 minutos.
- Grado 4: Soportar 10 litros/ min en un chorro de agua directo.
- Grado 5: Soporta un chorro de gua mayor en el mismo tiempo.
- Grado 6: Aún no puede ser sumergido, pero resiste muy bien ante chorros de agua directos.
- Grado 7: Resiste sumergido durante 30 minutos a 1 metro de profundidad.
- Grado 8: Cada fabricante escoge el tiempo máximo y niveles a los que podemos sumergirlo, siempre superior a un metro.
- Grado 9: La protección máxima en smartphones, soportando potentes chorros de presión de agua y siendo sumergido más tiempo y a mayor profundidad.
En caso de que no hayamos superado ninguno de los límites establecidos por el fabricante y tras su análisis, recibiremos la aprobación y no tendremos que pagar por ello, como así se indicaba la marca.