Ser diferente es de lo más complicado en el mercado de los smartphones, y la compañía LG lo intenta en esta ocasión con un dispositivo que tiene como elemento más llamativo el incorporar una funda que, entre otras cosas, dispone de una segunda pantalla que es completamente funcional. Esto es lo que ofrece el LG G8X ThinQ.
Con un acabado interesante en lo que tiene que ver con el diseño, lo cierto es que el teléfono móvil del que hablamos es bastante completo en lo referente al hardware. Un ejemplo de lo que decimos es que el procesador integrado es un Snapdragon 855 y la RAM asciende a los 128 GB, por lo que hablamos de una combinación que lo sitúa dentro de la gama alta de producto. Por cierto, otro buen detalle que ofrece este smartphone es que integra una batería de 4.000 mAh con recarga rápida de 21 W, por lo que en la autonomía habitual no hay que esperar problemas.
Como hemos indicado lo más llamativo del LG G8X ThinQ como se ve en su ficha, es que ofrece la posibilidad de dar uso a dos pantallas a la vez con la funda adecuada. La principal del terminal es de 6,4 pulgadas con resolución Full HD (tipo OLED), por lo que es solvente en la actualidad. La segunda tiene las mismas dimensiones y resolución, por lo que encaja perfectamente… y cabe destacar que existe un tercer panel en la trasera del accesorio Dual Screen de 2,1 pulgadas que es monocroma y que hace las veces de Active Display.
Cámara del LG G8X ThinQ y acceso a la prueba completa
La compañía coreana ha decidido que sean dos los sensores que se integran en el elemento principal y trasero, lo que le aleja un poco de los modelos más destacados del mercado. Cada uno de ellos ofrecen 12 y 13 MP de resolución, y no le faltan opciones como estabilización óptica –por cierto, la cámara para selfies es de 32 MP, más que suficiente sobre el papel-. Con un buen equipamiento en la conectividad, si deseas conocer qué puede dar de si este dispositivo, puedes hacerlo en el siguiente enlace: