Cómo activar la detección corporal en Android para que no se bloquee cuando lo llevas encima

Nuestro móvil cuenta con varios sistemas de seguridad para mantener nuestra privacidad a salvo. Ya sea utilizando el clásico PIN, un patrón o desbloqueo mediante huella digital o facial, la finalidad es que nadie más tenga acceso a nuestros datos personales y todo el contenido sensible que tenemos almacenado. Hoy os vamos a hablar del método inteligente que tiene Android para ahorrarnos desbloquear el dispositivo en determinadas circunstancias.
Aunque disponer de un método de bloqueo es algo prácticamente obligado, hay muchos momentos en los que no es necesario estar continuamente desbloqueando nuestro terminal. Android cuenta con un sistema que permite detectar de forma inteligente cuándo llevamos el smartphone encima. Se trata de la función conocida como Detección Corporal, y que hace uso de los instrumentos de medición internos del móvil como el acelerómetro. De esta forma, nuestro móvil sabrá cuando vamos caminando o cuando tenemos el móvil en el bolsillo o el bolso.
Si no somos nosotros…
Si está activada la Detección Corporal, nuestro móvil no se bloqueará, con lo que agilizaremos el proceso de acceder a él cuando lo cojamos de nuevo. El sistema se ha ido depurando con el tiempo, y Android puede aprender incluso nuestra forma de caminar gracias a los datos registrados previamente. De esta forma, si otra persona tiene nuestro móvil y camina con él, éste podría bloquearse al detectar otro patrón de pasos diferente.
Cómo activarlo
Para activar la Detección Corporal en Android, primero debemos tener activo algún método de desbloqueo fijado previamente. Después tendremos que ir al menú de Ajustes/Seguridad y Ubicación/Smart Lock. Dentro de este menú debemos tocar en Detección Corporal, donde podremos activar o desactivar la detección corporal de Smart Lock. A partir de este momento, cuando desbloqueemos el móvil permanecerá desbloqueado mientras detecte que lo llevamos encima.
No tan preciso en otros casos
Al dejar el dispositivo en algún sitio (por ejemplo encima de una mesa) podría tardar hasta un minuto en bloquearse automáticamente. Según indica la propia Google, el sistema podría no ser del todo preciso en algunas circunstancias. La compañía pone algunos ejemplos, como ir en avión o en barco, donde es posible que nuestro móvil no se bloquee automáticamente. En otros medios de transporte como coche o autobús, el móvil podría tardar más de 5 minutos en bloquearse.