Apple dio a conocer ayer mismo los nuevos iPhone X, i Phone 8 y iPhone 8 Plus. Además de la gran novedad que suponía la pantalla sin marcos del primero, otra de las más notorias características de los tres modelos fue la incorporación de la carga rápida y carga inalámbrica. La compañía presumió que sus smartphones ahora cargarán sus baterías mucho más rápido, pero no especificaron que el usuario deberá desembolsar más dinero si quiere hacer uso de esta prestación tan útil como necesaria hoy en día.
Aunque se trata de una característica presente en un buen número de smartphones Android desde hace años, Apple hizo hincapié en la presentación de sus nuevos iPhones en la carga rápida y la carga inalámbrica como novedades destacadas. Sin embargo, la tecnológica no fue del todo específica puesto que se guardó algunos detalles que pueden resultar un tanto desconcertantes para los potenciales compradores de los nuevos iPhone X, iPhone 8 y iPhone 8 Plus.
La carga rápida de los iPhone X y iPhone 8 requiere accesorios adicionales
Batería cargada al 50% de su capacidad en aproximadamente media hora. Eso es lo que ofrecerá la carga rápida de los iPhone X y iPhone 8 cuando estén disponibles en el mercado. Sin embargo, los compradores de los modelos compatibles verán cómo, de serie, sus smartphones no podrán hacer uso de la esperada carga rápida. ¿Por qué? Principalmente porque el pack de venta tan solo incluye un cargador original de 5W, insuficiente para acelerar la carga con la tecnología implementada por Apple.
Para tal propósito, el usuario requerirá accesorios adicionales que tienen un coste adicional al de los iPhones. En primer lugar, se requiere un cable Lightning con adaptador a USB-C para insuflar a la batería la intensidad de carga necesaria que el USB tradicional no es capaz. Este cable, el oficial, tiene un coste de 29 euros en su versión más económica puesto que el cable con dos metros de largo tiene un precio de 39 euros. Si bien es una condición indispensable que sea original, en el mercado de accesorios podríamos encontrar algún modelo de cable con adaptador compatible a un precio inferior. Sin embargo, ya supone una adquisición forzada.
Un sobrecoste inesperado para el usuario
Aunque el cable Lightning con conexión USB-C ya permite hacer uso de la carga rápida si lo conectamos a un conector USB-C en el ordenador, lo más seguro es que el usuario requiera un cargador USB-C. Si recurrimos nuevamente a la tienda oficial de Apple, volvemos a encontrarnos con que la opción más económica es el cargador con una salida de 29W. El mismo tiene un precio de 59 euros. Otra opción es adquirir un cargador compatible en distribuidores como Amazon.
De un modo u otro, aunque recurramos a accesorios lo más económicos posibles, nos encontramos con la incomodidad de que para hacer uso de la carga rápida de los iPhone X y iPhone 8, el usuario tendrá que comprar por separado los citados accesorios, con el consiguiente gasto adicional y molestia a la hora de realizar esta compra. Un fuerte contraste respecto a la política de otras marcas que ya incluyen en el pack de venta los accesorios necesarios para aprovechar la carga rápida. Un efecto que a su vez se ve contrastado por el elevado precio de los nuevos modelos de Apple.