Suena demasiado bien para ser verdad, pero eso es precisamente lo que promete la compañía israelí StoreDot, y además asegura que será posible a lo largo del próximo año. Según apunta el presidente de la firma, las baterías patentadas entrarán en producción a principios de 2018 para posteriormente estar disponibles de cara a los fabricantes durante la segunda parte del año. Así pues, si se cumplen los plazos, sería posible cargar la batería de un smartphone en tan solo cinco minutos.
Lo cierto es que la firma es una vieja conocida puesto que conocemos su investigación en el campo de las baterías y la tecnología de carga rápida desde 2014. De hecho, se pudo ver un adelanto de lo prometido en la feria de electrónica de consumo de Las Vegas, en la pasada edición de 2015. Ahora, el proyecto habría alcanzado su fase final, tanto como para adelantar la entrada en producción de estas milagrosas baterías. Lo complicado llega cuando tenemos que cargar el móvil sin tener electricidad, un reto al que a veces nos enfrentamos.
Tecnología de carga rápida FlashBattery
Detrás de la promesa de cargar la batería de un smartphone en apenas 5 minutos se esconde la tecnología de carga rápida FlashBattery. A partir de la información disponible, podemos saber que el secreto de tan acelerada carga se debe principalmente a la reformulación de la composición química de la batería, a la que se le han introducido compuestos orgánicos no tóxicos basados en la estructura de los nanomateriales. Los mismos tendrían la capacidad de minimizar la resistencia al paso de la electricidad, además de aumentar la densidad de carga.
Tiempos de carga de ensueño
Si finalmente la tecnología de StoreDot llega a buen puerto y cumple con lo prometido, los fabricantes de smartphones tendrán en su mano una novedad de gran repercusión de cara a finales de 2018. Y es que desde hace años se trabaja en esta área, la carga rápida, para minimizar los problemas de autonomía que acusan este tipo de dispositivos.
De hecho, este año está previsto el estreno de Quick Charge 4.0, el sistema de carga rápida de Qualcomm, además de otras soluciones como la de Meizu con Super mCharge. Mientras que la primera promete el 50% de carga (2.750 mAh) en 15 minutos, la segunda precisamente mostró en la pasada edición del Mobile World Congress que sería capaz de recargar al 100% la batería de un smartphone en apenas 20 minutos.
Sin duda, esta perspectiva nos permite visualizar cómo serán los avances en materia de autonomía en los smartphones en un futuro inmediato. Tecnologías de carga rápida cada vez más eficientes y veloces, combinadas a su vez con la inclusión de baterías de mayor capacidad sin comprometer las medidas y peso de los teléfonos móviles.