La semana pasada salía a la luz un problema de hardware que inutilizaba la pantalla de los iPhone 6 y iPhone 6 Plus. Con el uso, el chip que gestiona la función táctil de la pantalla se deteriora hasta impedir por completo la utilización del smartphone. Apple, que estaba al tanto de este defecto, ahora afronta la primera demanda colectiva en California. Demanda que podría extenderse a otras regiones a medida que aumentan los afectados por un mal ya denominado Touch Disease y que, de alguna forma, está ligado a otro problema conocido, el Bendgate.
iFixit destapaba la semana pasada un fallo de hardware de los iPhone 6 y iPhone 6 Plus. Advertidos por el elevado número de usuarios que presentaban la misma avería, investigaron el motivo que se escondía detrás. Todo comenzaba con la aparición de una franja grisácea en la parte superior de la pantalla, seguido de fallos en la función táctil para la posterior anulación total de la sensibilidad de la pantalla. De este modo, los afectados se encontraban con un iPhone inservible.
Los afectados por el iPhone 6 defectuoso se unen
La consulta a diversos talleres de reparación no solo reportó información sobre el aumento en el número de unidades de iPhone 6 y iPhone 6 Plus afectadas. iFixit logró saber que detrás de este problema se esconde un fallo del hardware. Un defecto de fábrica. Al parecer, la torsión que experimenta la placa de estos modelos a causa del temido bendgate -la carcasa de aluminio se dobla en ciertos puntos al soportar cierto tipo de fuerzas- afecta de lleno a uno de los chips que gestiona el digitalizador de la pantalla. De hecho, el problema se complica puesto que dicho chip carece de la protección metálica que incluían modelos como el iPhone 5 y iPhone 5s. En su lugar, Apple incluyó un material adhesivo que ha resultado letal.
De hecho, este cambio en el hardware es el utilizado por los primeros usuarios que han demandado a Apple. Y es que la compañía tendrá que hacer frente a una demanda colectiva a nivel nacional formulada en la corte federal de San José, California. Un extracto de la misma indica lo siguiente:
«The iPhones are not fit for the purpose of use as smartphones because of the touchscreen defect,»
Por tanto, la demanda hace alusión a que los iPhones afectados no son aptos para su uso como smartphones debido al defecto encontrado en la función táctil de la pantalla.
Un fallo que puede ir en aumento…
La parte demandante alega que se trata de un defecto de fábrica, apuntando directamente a que la sustitución del metal protector del citado chip por una capa plástica promueve que las soldaduras del chip pierdan contacto con el conector de la placa y, como resultado, la pantalla deje de funcionar.
Por el momento se desconocen las exigencias de los demandantes, pero de cualquier modo puede suponer un importante revés económico para Apple si se viera obligada a sustituir las unidades afectadas por otra libre de fallos. Y es que la magnitud del defecto de fábrica aún no se ha concretado puesto que es ahora, tras algo más de un año de uso, cuando los iPhone 6 y iPhone 6 Plus afectados comienzan a fallar.