El nuevo teléfono HTC One A9 es un modelo que llega con la intención de posicionarse como un terminal con diseño muy atractivo, su acabado en metal cepillado es un claro ejemplo de lo que indicamos, y ofrece unas prestaciones que son interesantes pero sin llegar a ser consideradas de gama alta –aunque el rendimiento no está comprometido sobre el papel-. Y, justo esto, es lo que podrás conocer.
Lo cierto es que el aspecto que tiene el HTC One A9 es muy atractivo. Con un cuerpo tipo “unibody” y con unas líneas muy suaves en los bordes, la integración de la pantalla de 5 pulgadas con calidad Full HD es excelente. Por cierto, que se incluyen dos ranuras para las tarjetas, una para la Sim y la otra para las microSD que permiten ampliar su capacidad de almacenamiento en hasta 200 GB.
En lo referente al hardware principal, las elecciones de HTC son correctas. La RAM es de 2 GB, al menos en el modelo que hemos probado -hay otro con tres, pero por el momento no se desplegará en nuestro país-. El procesador es un Snapdragon 617 de ocho núcleos que se basta para mover aplicaciones de todo tipo, pero hay que tener en cuenta que este SoC no es el más potente de la gama de Qualcomm. Un detalle final: la batería es de 2.150 mAh, que es posible que parezca poco pero la inclusión de la nueva versión del sistema operativo de Google y lo poco exigente de su hardware pueden permitir una amplia autonomía, lo que podrás comprobar en la prueba completa.
Con Android 6.0
El HTC One A9 es un modelo que tiene un detalle realmente destacado: llega con Android Marshmallow, por lo que es uno de los primeros de la gama Nexus que ofrece esta posibilidad. La verdad es que el funcionamiento, pese a contar con la capa Sense, es muy bueno y además se le saca partido a las nuevas opciones como el lector de huellas, que se integra en un botón Home frontal bastante útil.