Ya sea porque quieres aprovechar tu flamante pantalla QHD, aunque puede que esto no sea buena idea como explicaremos después, o que se quiere exprimir el juego del momento aumentando su framerate y que al mismo tiempo no vaya a «tirones», Samsung ha lanzado el Game Tuner, una aplicación para ajustar la resolución de los juegos en algunos de sus terminales.
No dudamos que pronto algún hábil desarrollador va a coger la idea y transportarla al resto de terminales pero, de momento, es algo que sólo está disponible para los terminales de Samsung. Se trata del Game Tuner, una nueva aplicación que ya pueden descargar gratuitamente todos aquellos que tengan un dispositivo Galaxy, o mejor dicho, de momento quien tenga un Galaxy S6, S6 edge, Note 5, y S6 edge+.
¿Y qué tiene de especial la posibilidad de personalizar la resolución de los juegos? Seguro que algún «jugón» de PC habrá enarcado una ceja dado que es algo con lo que batallan desde el primer día. La posibilidad de cambiar la resolución de los juegos nos permitirá, primero, aprovechar las pantallas 2K o QHD de los terminales al límite, consiguiendo unos gráficos mucho más detallados y vistosos. Un ejemplo lo podéis ver en esta imagen que ponemos a continuación, cortesía de Android Police, en la que se ve la comparación del mismo juego – Heartstone – a 480p y 1440p.
Cómo comentábamos al comienzo, quizás poner los juegos en calidad QHD no sea una buena idea, sobre todo para la autonomía, dado que vamos a consumir muchos más recursos además de que podríamos encontrarnos con alguna que otra ralentización, sobre todo en terminales del año pasado.
Por otra parte, si que es más interesante reducir la calidad, por ejemplo, para permitir mantener el framerate o los cuadros por segundo en una cifra mucho mayor y lograr una suavidad que hace tiempo que no veíamos y una velocidad en el juego aunque tengamos que sacrificar algo de calidad en los gráficos. Además, permitirá también ahorrar en el uso de recursos, lo que significa que también lo notaremos en la batería.
Según se comenta, esta aplicación llega gracias a la colaboración de Samsung con Oculus para la creación de las Gear VR, ya que es bien conocida la obsesión de esta empresa con la gestión de la GPU para obtener el máximo rendimiento reduciendo el consumo energético y el calor producido.