Samsung parece que quiere desembarazarse un poco de su dependencia de Google y podría estar enfocando sus «wearables», y en concreto el Samsung Galaxy Gear 2 que podríamos ver en el Mobile World Congress con Tizen como sistema operativo en lugar de Android.
El próximo lunes día 24 a las 20:00 de la tarde, todas las miradas del sector estarán en el evento Samsung Unpacked 5, donde según todos los pronósticos, se desvelará el nuevo terminal estrella de la marca, el Samsung Galaxy S5.
Sin embargo, este no va a estar solo en el escenario de la cita barcelonesa y en las quinielas toma fuerza la presencia del nuevo smartwatch Samsung Galaxy Gear 2 que, según fuentes citadas por USA Today, llegará con Tizen como sistema operativo, y en concreto, con la nueva versión basada en HTML 5.
Tizen en un smartwatch tiene más sentido, y futuro, que en un smartphone
Este movimiento, que por supuesto no ha tenido confirmación por parte de los portavoces de Samsung, tiene bastante lógica. Primero porque los wearables son un campo inexplorado y donde, de momento, no hay un claro líder en términos de software para gestionar sus sistemas. Además, la opción de un OS basado en HTML5 para un dispositivo que no es que necesite de la conexión con un smartphone o tablet, es que sin ella tiene poco sentido, da dos grandes ventajas: la primera es que, sobre el papel, es 100% compatible con cualquier otro OS que lleve el dispositivo que hace de «servidor» y la segunda, un software de este tipo se han mostrado como más eficientes en el consumo de batería, algo clave en un reloj inteligente que, por necesidad, llevará una batería de reducidas dimensiones.
Como ejemplo de esto último podemos citar las palabras de los responsables de Geeksphone que en la presentación del Revolution, que puede llevar Android y otro OS, nos aseguraron que el mismo terminal con Firefox OS, otro software basado en HTML5, tenía un incremento notable, incluso llegando a un tercio más, de la autonomía frente al consumo cuando ejecuta el OS de Google.
Tizen ha sido fuente de muchos rumores en los últimos tiempos, posicionándose como el software que Samsung quiere utilizar para su gama de entrada y que hace apenas una semana anunciaba el apoyo de 15 nuevos socios en la Tizen Association del calado de otros fabricantes como ZTE, la red social china Baidu o el operador norteamericano Sprint.
Pese al retraso del lanzamiento del que se esperaba el primer smartphone Tizen del 2014, Samsung parece no haber tirado la toalla y enfocar su sistema operativo alternativo en un mercado que se espera que tenga un volumen de hasta 15 millones de unidades vendidas en 2014, según Forbes, no deja de ser un movimiento muy inteligente.
Fuente: USA Today