Ya hemos podido leer que los primeros en comprar el Nexus 5 de Google en el momento de su lanzamiento oficial están disfrutando de las primeras horas con el dispositivo. Este nuevo teléfono inteligente de Google combina la última versión del sistema operativo de Google, Android 4.4 KitKat, con unos componentes dignos de la gama alta, tal y como hemos estado viendo estos días atrás. Y, aunque pronto, el terminal puede romperse (sobre todo la pantalla) así que, veamos cuánto de fácil o difícil es repararlos según iFixit
Los chicos de iFixit se dedican, cada vez que sale un nuevo dispositivo al mercado, a desmontarlo pieza a pieza, mostrarnos su interior y componentes, y por último ofrecernos una valoración entre cero y diez en función del grado de dificultad para desmontar el aparato en cuestión. En esta ocasión le toca al Nexus 5, el nuevo teléfono inteligente que recientemente ha lanzado al mercado la compañía de Mountain View y que llega para batallar directamente con el catálogo actual de telefonía móvil de alta gama.
Nexus 5 (8 / 10): fácil de reparar, menos la pantalla
En el vídeo que a continuación podréis ver y que nos ofrecen desde iFixit podréis conocer, al detalle, todos los detalles que desarrollan ellos mismos. Pero, básicamente, lo que vienen a contarnos es que el Nexus 5 es fácil de reparar. Sin embargo, la pantalla del dispositivo, en caso de que se rompa o necesite otro tipo de reparación / sustitución nos saldrá caro, o bien nos costará bastante «trabajo» llevar a cabo el proceso de sustitución por una nueva por nosotros mismos.
Pantallas grandes y costosas… el pan de cada día
Como hemos podido ver en el vídeo, la batería del dispositivo viene bien sujeta dentro de su propio hueco, pero haciendo «palanca» es muy fácil sacarla de ahí. La nota final o la valoración que los de iFixit le ponen al Nexus 5 es muy buena. Estamos hablando de un ocho sobre diez, y como ya hemos mencionado anteriormente, la valoración empeora por culpa de la pantalla del dispositivo de Google.
No nos extraña esto en absoluto. Desde hace ya bastante tiempo, los teléfonos inteligentes que utilizamos a diario tienen pantallas táctiles de gran tamaño que se caracterizan por su fragilidad. Y es que, a pesar de la protección Gorilla Glass, se rompen. Y, teniendo en cuenta que se rompen, no debemos olvidar que se trata de un componente que se vende caro (otra cosa es lo que cuesta fabricarlas).